Fútbol
El momento más difícil de Koeman
El presidente mantuvo una reunión de urgencia con la cúpula deportiva hasta las cuatro de la madrugada y hoy podría ser destituido
![Koeman durante el partido entre el Barcelona y el Benfica](https://s2.abcstatics.com/media/deportes/2021/09/30/dasdd-U301154009190JsE--1248x698@abc.jpg)
El futuro de Ronald Koeman pende más que nunca de un hilo. La derrota ante el Benfica, la segunda en Champions, y la imagen ofrecida dejan al neerlandés sin crédito. Si el técnico ya estaba sentenciado, los resultados pueden devorarle y ser destituido en las próximas horas. De hecho, Joan Laporta mantuvo una reunión con su círculo más estrecho en cuanto aterrizó procedente de Lisboa . El presidente se encerró en un despacho de la Ciudad Deportiva junto a Rafa Yuste, Mateu Alemany y Enric Masip hasta las cuatro de la madrugada. Un encuentro que duró una hora y que fue la culminación de las conversaciones iniciadas en el avión. A lo largo de este jueves se esperan contactos del área deportiva con la directiva para tomar una decisión definitiva. Laporta no se quiere precipitar pero reconoce que la situación en insostenible . Además, los últimos encontronazos dialécticos entre el mandatario y el entrenador han enrarecido aún más el ambiente.
Ante el Benfica fueron varias las decisiones de Koeman que molestaron a la cúpula directiva. Principalmente regresar al controvertido sistema de tres centrales tras el buen partido ante el Levante y sentar a Gavi, que estaba aportando calidad al centro del campo. No obstante, la decisión que puede haber sido su sentencia definitiva fue la que se produjo tras el cambio de Piqué . Si desde el palco se respiró pensando en un cambio ofensivo, la sorpresa y la decepción fueron mayúsculas cuando el holandés decidió retrasar a Frenkie de Jong , que estaba siendo el más clarividente en ataque, incrustarlo en el centro de la defensa y mantener el 3-5-2.En ese momento, Laporta tuvo claro que el ciclo de Koeman acaba en el banquillo del Barcelona.
No será una sorpresa la destitución de Koeman. De hecho es un tema recurrente que planea sobre el Camp Nou desde que Joan Laporta ganó las elecciones. Entonces ya le dio un margen de quince días para buscarle un sustituto. No lo encontró pero filtró que la continuidad del holandés dependía de los resultados, de la apuesta por un sistema definido basado en 4-3-3 de la escuela de Cruyff y en que promocionara a jugadores con los que no contaba, como Umtiti y Riqui Puig. No le gustaron al técnico estas palabras y demostró su personalidad manteniéndose firme en sus planteamientos. Lo demostró en Lisboa y también con el ostracismo de Umtiti que aún no ha disputado ni un minuto. La situación se agravó en vísperas del partido ante el Granada, cuando decidió leer un comunicado pidiendo el apoyo del club «en palabras y en hechos» y asegurando que «sería un éxito quedar en los puestos altos en la Liga» y tildó de «milagro» pensar en hacer algo en Europa. No aceptó preguntas. Fue su manera de mostrar su disconformidad con los mensajes del asesor del Laporta, Enric Masip, en las redes sociales. Koeman recibió el correctivo también del vestuario, que le contradijo públicamente. Tanto Piqué como Sergi Roberto le respondieron que sí había equipo para ganar títulos, lo que dejaba en excusa las justificaciones del entrenador.
Koeman se sabe sentenciado. Desde hace mucho tiempo. Tras la derrota ante el Benfica lo dejó entrever. «Solo puedo opinar de mi trabajo con el equipo. Me siento respaldado por mis jugadores y su actitud. Del resto no sé. Del club no sé », soltó dando a entender e poco apoyo que recibía del palco. «Para cualquier entrenador siempre es complicado, estando en el Barça, si no ganas dos partidos de Champions League. Es una situación delicada. La entiendo perfectamente. Es intentar cambiar cosas, darle tiempo al equipo. Hay cosas del fútbol. El tema físico, el tema velocidad... somos inferiores. Donde se tiene que ganar es con los jugadores que tenemos, con nuestro estilo, nuestra manera. Posesión, oportunidades... lo hemos hecho, pero si no marcas, no ganas. Entiendo que se fijan en el resultado final. Lo acepto. Es así. Ganar es tranquilidad. Pierdes y ahora el futuro del entrenador... este es el mundo en el que vivimos. Si no lo aceptas, lo mejor es que te vayas», añadió.
Koeman ya sería pasado en el Barcelona si Laporta hubiera encontrado el sustituto idóneo, pero a la falta de un candidato que genera ilusión unánime y garantice la fidelidad a la identidad que pretende el presidente, se une la grave crisis económica que azota al club. El Barcelona deberá hacer frente a la indemnización que tiene que cobrar Koeman (unos 13 millones teniendo en cuenta su salario y la cláusula de penalización) y convencer al nuevo técnico para que gane menos de lo que podría percibir en otros equipos. De momento se valoran tres candidatos, con sus pros y sus contras: Xavi Hernández, Bob Martínez y Andrea Pirlo . El primero es la apuesta que firmaría toda la grada pero desde la planta noble se considera que le falta experiencia a gran nivel y a Laporta le hubiera gustado que primero pasara una o dos temporadas en el filial, como Guardiola o Luis Enrique en su momento. Martínez está centrado en la selección belga y es poco probable que la abandone para recalar en el Camp Nou, y Pirlo es uno de los técnicos que más gustan al presidente (Además está sin equipo) pero no tiene ningún tipo de tradición culé.
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