Liga
Isak, el chico discreto que se transforma en el campo
Decisivo en la Copa del Rey, el espigado goleador de la Real cerró en el derbi una semana de ensueño
La discreción que acompaña en su vida privada al sueco Alexander Isak (Solna, 21 de septiembre de 1999) muta en osadía y descaro cuando salta a un terreno de juego. Una mezcla que esta temporada está cautivando a la afición de la Real Sociedad . Doce goles y tres asistencias en los últimos doce partidos avalan la frescura de un delantero de 20 años firmado en verano y que ayer puso el broche de oro a una semana de ensueño al provocar la victoria ante el Athletic (2-1) . El futbolista extranjero más joven en la historia del club donostiarra se había consagrado solo tres días antes en Madrid dinamitando el Santiago Bernabéu con dos tantos en los cuartos de la Copa. Conocido como el «Ibrahimovic negro» por sus similitudes futbolísticas y de altura con el jugador del Milán (mide 1,90 metros, cinco centímetros menos), la gente de Anoeta ha encontrado en el espigado ariete a un nuevo ídolo. Y más tras decidir ayer el derbi vasco a falta de ocho minutos (Crónica y goles del Real-Athletic)
De Alexander Isak se sabe que es un tipo familiar y que suele escaparse a Asmara, la capital de Eritrea, donde ha puesto en marcha proyectos para fomentar el fútbol entre la chavalería de uno de los estados más pobres del planeta. El país que abandonaron sus padres en busca de un futuro mejor para sus hijos, nacidos ya en Suecia. Isak se crió en Solna junto a su hermano Sened Teame, pero no olvida sus raíces. Tampoco pierde el olfato realizador que exhibió cuando empezó a despuntar en las categorías inferiores del AIK. Allí aprendió a trabajar la paciencia y a ser un jugador de equipo. Pese a su exhibición copera ante el Real Madrid , club al que rechazó para firmar en 2016 por el Borussia Dortmud , ayer aguardó su momento en el banquillo y entró en el minuto 54 en el puesto del díscolo Willian Jose. Su asistencia a Portu en el 1-0 y su tanto después del empate de Williams desequilibraron el derbi. Pese a su apariencia delgada, Isak es un mocetón fuerte, veloz, con buena conducción de balón y hábil en el juego de espaldas. Pero también tiene mucho gol. En los 28 partidos disputados este curso con los donostiarras acumula ya 14 dianas. Para un jugador de su edad y su enorme proyección, su cláusula de 70 millones, 30 para su antiguo club, se antoja escasa.
Porque en su corta carrera, Isak no deja de derribar muros. Goleador más joven del AIK Solna (16 años y 199 días), en la Navidad de 2017, cuando le fichó el Borussia Dortmund, se convirtió en el traspaso más caro en la historia del fútbol sueco (8 millones), superando el protagonizado por Ibrahimovic en su día cuando cambió el Malmoe por el Ajax. Pero el nuevo ídolo realista también ha empezado a dejar huella en su selección, donde figura como el goleador más prematuro (17 años, tres meses y 22 días). Un jugador discreto que apunta a estrella.