«Me da igual el fútbol... te tengo que reventar la boca»

El Celtic Pulianas visita este domingo (16.30 horas) el campo del C.F. Motril en encuentro correspondiente a la jornada 19 del Grupo 4 de la Primera regional Andaluza, un duelo en el que no podrá contar con su delantero Guillermo debido a la sanción de 16 partido s que le ha impuesto la Real Federación Andaluza de Fútbol (RFAF) por «producirse violentamente con un contrario y agredir al árbitro una vez expulsado». El castigo llama más aún la atención porque este mismo jugador acababa de cumplir otra sanción de once partidos por idénticos motivos. A finales de noviembre del pasado año, otro futbolista de este club granadino era suspendido por un año después de que se sacara el pene e intentara golpear con él a un linier .

El pasado 3 de enero, en el minuto 61 del partido ante el Universidad de Almería, el árbitro cordobés Romero Campos expulsó a Guillermo, que acababa de entrar en el terreno de juego, «por propinar una patada a un jugador contrario estando el balón en juego, pero sin opción alguna de jugarlo», según reflejó en el acta del encuentro, correspondiente a la jornada 17 de liga. El jugador reaccionó de manera violenta y golpeó en el pecho al juez , que decidió suspender el encuentro y se dirigió a los vestuarios. Según añadió en el acta, el futbolista expulsado continuó en la caseta «con sus agresiones verbales con voz enérgica, brazos en alto y actitud agresiva para dirigirse hacia mi persona en los siguientes términos: ¡a mí me da igual el fútbol... te tengo que reventar la boca, hijo de puta! ». Unas amenazas que provocaron al juez un cuadro de ansiedad.

Unos hechos por los que el Comité de Competición castigó con 16 partidos de sanción al delantero del Celtic Pulianas, que en la jornada del pasado 10 de enero, en la contienda ante el Vandalia de Peligros, ya no pudo contar con un futbolista reincidente en este tipo de agresiones , según denuncia la web Sindicato de Árbitros .

Y es que, en la segunda jornada del campeonato, en la visita al C.F. Motril, precisamente el rival de este domingo, Guillermo ya vio la roja directa en el último minuto de partido por agredir a un contrario y encararse airadamente con el árbitro. Entonces, el Comité de Competición ya le castigó con 11 partidos (cuatro por agredir a un rival, cinco por actitud airada hacia el árbitro y otros dos por menosprecios al juez).

En su tercer partido después de cumplir esa sanción, Guillermo volvió a perder los papeles con el árbitro del duelo que enfrentó a su equipo frente al Universidad Almería (0-1 cuando fue suspendido) y ahora tendrá que permanecer 16 partidos fuera de los terrenos de juego.