La dura confesión de Paul Scholes: «Bebía todo el día, tenía sobrepeso»

Paul Scholes fue durante casi dos décadas dueño y señor del centro del campo del Manchester United . Sir Alex Ferguson tuvo en el futbolista inglés a uno de sus fijos y con él logró grandes metas como ganar una Champions League u once Premier League. En 2013 anunció su retirada de los terrenos de juego y desde entonces es habitual verle en los platós de televisión como comentarista. Recientemente ha concedido una entrevista a ' ESPN ' en la que cuenta algunos de los momentos más oscuros de su vida.

Antes de convertirse en un jugador profesional, Scholes fue un aficionado al equipo más, y visto lo visto, no llevó una vida muy ejemplar: « Me encontré bebiendo jueves, viernes, sábado, domingo y lunes a veces. Como culaquier muchacho local, siempre estuve alrededor de la cultura de los aficionados que asistían a los partidos. Mi padre me llevó a uno de mis primeros encuentros ante el Chelsea y se inició una pelea fuera. Mi padre y yo nos agarramos y salimos corriendo, perdí mi zapato», cuenta.

A sus 43 años , ha afirmado haber estado en contacto en algún momento de su vida con una de las facetas más controvertidas del fútbo inglés. «Tuve que salir de ese ambiente. Bebía la noche antes de un partido. Estaba en una cultura en la que ibas a los partidos y te tomabas una copa en el autobús rumbo al estadio, y luego otra en el camino de regreso». Cuando se le presentó la oportunidad de dar el salto a la élite fue cuando hubo un punto de inflexión.

«No es el entorno en el que quieres estar como futbolista. Me eligieron para un equipo de Inglaterra y recuerdo haber pensado: 'Tengo que salir de este entorno'. Estaba bebiendo todo el día, tenía sobrepeso », dice. «Era una cultura de la clase obrera de ver fútbol. Sé que todavía sucede porque tengo compañeros que van a los partidos. Me encantaría ir con ellos, ser un fanático normal, pero no creo que sea fáci», añade.

Cuando dejó atrás este ambiente su vida cambió para siempre. Comenzó una exitosa carrera en el Manchester United, el equipo de su corazón, y se convirtió en una leyenda de la selección de Inglaterra y de Old Trafford.