Iago Falque, centenario en tierra hostil
El gallego es el séptimo español en alcanzar los cien partidos en la Serie A
![Iago Falque, durante el partido disputado contra el Cagliari el pasado 29 de octubre](https://s1.abcstatics.com/media/deportes/2017/11/05/iago-falque-kvPI--1240x698@abc-k0HH--1240x698@abc.jpg)
Que el peso del futbolista español en el Calcio haya ganado fuerza en los últimos tiempos no debería opacar la barrera que el territorio transalpino ha plantado históricamente a quienes han querido probar suerte al otro lado del Mediterráneo. La última convocatoria de Julen Lopetegui para los amistosos frente a Costa Rica y Rusia dejó una lista de 23 nombres con tantos integrantes de la Premier League como de la Serie A. Reina, Suso, Luis Alberto y Callejón han abierto la puerta de una liga que parecía tenerla cerrada con llave al pelotero ibérico.
Es en Italia donde sin tanto foco por la actualidad de la selección pero con equiparable bombo a tenor de su rendimiento destaca Iago Falque (Vigo, 1990), uno de los once españoles que en el presente curso se desempeñan en la máxima categoría del fútbol italiano. Aunque lo suyo dista un trecho de ser una novedad: desde el verano de 2014 lleva el atacante vigués haciéndose un sitio en el Calcio. Primero en el Génova, su primer destino una vez dejada atrás la infructuosa experiencia que tuvo en el Tottenham; más tarde en la Roma, donde pudo cocer su juego al calor que desprendía Francesco Totti y, por último y parece que definitivo, en el Torino, donde el pasado fin de semana alcanzó los cien partidos en liga . En ese caprichoso altar ya estaban Luis Suárez (319 partidos), Luis del Sol (278), Borja Valero (176), Joaquín Peiró (174), José Callejón (161), Raúl Albiol (137) y Pepe Reina (115).
Goleador
A Falque, fino estilete que desfila con su zurda siempre bien afilada por el pico derecho del área, no le bastó con alcanzar la centena de cualquier manera: anotó el gol que nivelaba la balanza frente al Cagliari y que a la postre serviría para ganar el encuentro. Mas no es ésta una eventualidad en el repertorio del atacante: suma 31 tantos desde que aterrizara en Italia . Si se le suman las 15 asistencias que en estos tres años ha repartido, se obtiene un pastel del que resulta una media de casi un gol producido por cada dos partidos. Números que, si se comparan con los de un futbolista con rango similar en su equipo como Suso, pieza troncal para este nuevo Milan y que ya encadena cierta continuidad en los requerimientos de Lopetegui, resulta que los 0,46 goles producidos por el del Torino apenas no alcanzan los 0,47 que aporta el milanista.
El atacante vigués promedia casi un gol producido por cada dos encuentros disputados (0,46)
«Noto que estoy en el mejor momento de mi carrera , tanto física como mentalmente. Tengo más confianza en mí, me siento más jugador. Sé que es el momento, la etapa perfecta . De aquí a los 30 o 32 años», cuenta al otro lado del teléfono el que fuera canterano de Barcelona o Juventus. A Italia, dice, llegó en un momento «diferente, más maduro». No logró cuajar en un Tottenham donde un tal Gareth Bale postulaba su candidatura a entrar en el once al mismo tiempo que el español. En el mercado invernal de 2013 se fue cedido al Almería a la caza de minutos y, media temporada después, una completa al Rayo Vallecano. No rompió su techo, pero sí sumó un cúmulo de buenas actuaciones que le valieron para que el Génova invirtiera dos millones de euros en su contratación. Italia sería entonces testigo de la plena eclosión de Falque.
Similar a España
«Aquí el fútbol tiene muchas cosas similares a España, como el carácter. Es un tipo de fútbol que a mí me viene bien. Ahora hay muchos españoles dando mucho nivel aquí. Es un juego técnico y táctico, no de ida y vuelta, como en Inglaterra, donde al jugador español, que es menos físico, le cuesta más destacar », explica el zurdo. Su discreta estatura y el delicado tacto con el que amasa la pelota lo convierten en un futbolista propicio para buscar la pausa y encontrar espacios allá donde escasean, virtud impagable en un territorio de picas en alto como es el italiano. El mismo camino que hoy andan con premura nombres con cualidades equiparables como Luis Alberto, Borja Valero o Suso.
«La suerte de nacer en España la tienes para lo bueno y para lo malo»
Le bastaría con una temporada para formar una carta de presentación con trece goles que le llevaría a jugar la Champions League con la Roma de Francesco Totti. Del mito romanista destaca Falque su «comportamiento fuera del campo, mentalidad y personalidad». No cuajó en una escuadra que contaba con Dzeko, Gervinho, Salah, Perotti o El Shaarawy para poblar el frente de ataque. El Torino sería su vía de escape.
Fijo en el esquema de Sinisa Mihajlovic desde su llegada al club, Falque ha alcanzado el cénit de su juego tornándose un futbolista, como poco, diferencial. Fueron 12 goles y 8 asistencias los que brindó en su primer año en el «Toro», y esta temporada ya discurre con el vigués como máximo anotador en un conjunto que cuenta con el último tercer máximo realizador del último año, el joven Andrea Belotti .
«El objetivo principal es hacerlo bien aquí, seguir en esta Liga, luego el resto llega solo. La selección es obvio que hace ilusión. Es complicado, pero por lo menos hay que intentarlo», detalla Falque, que cree que de haber nacido en otro país «hubiera tenido más oportunidades». Tanto bien le ha hecho foguearse en la ornamental Masía como perjudicial le ha resultado convivir con la mejor generación de centrocampistas que España vio. «La suerte de nacer en España la tienes para lo bueno y para lo malo», cierra, con un ojo puesto ya en el partido frente al Inter de Milán (hoy, 12.30 h., Bein Sports).