Barcelona-Arsenal
El Barça hizo rápido y bien lo que tenía que hacer
Neymar, Messi y Luis Suárez sentencian una eliminatoria ante un Arsenal que lo intentó
Crónica
Me gusta este Barça porque me gusta cuando el talento se impone. Me gusta Messi porque me gusta cuando el talento entra como los tanques por la Diagonal, cuando dicta su ley altísima lejos de las insufribles intermitencias del tráfico diario. Me gusta Luis Enrique porque me gusta cuando somos más libres y más brillantes, cuando el relámpago nos alumbra desde el borde de la tormenta y nos sacude hasta que brota el gemido.
A Messi Hacienda le continúa reclamando siendo como es el mayor contribuyente de España. A Luis Enrique le reprochan su supuesto mal carácter. Pero ahí están, haciendo frente a todo con las únicas armas de su talento y de su imaginación, y llevando como siempre un poco más allá los límites de la Humanidad.
Barcelona estuvo pletórica ayer, como todos los días que el Barça juega la Champions. Estaba sexy mi ciudad, como las chicas cuando realmente les interesa el hombre con el que han quedado. Los buenos restaurantes colgaron el «no hay billetes». Puyol almorzaba con De la Peña en Kru, y a pocas mesas de distancia estaba el hermano de Messi, Rodrigo, con unos amigos. La familia Messi se ha unido a los hermanos Iglesias, dueños de este magnífica casa, y socios también de Ferran y Albert Adrià, para abrir antes del verano un nuevo restaurante en Barcelona.
El partido empezó con el Barça dejando como siempre que el rival se desgastara con sus voluntariosas carreras que la mayor parte de las veces no conducían a nada. En el 16, Neymar le mandó una precisa asistencia a Messi que el argentino recibió con un control prodigioso pero el portero Ospina con unos muy meritorios reflejos pudo rechazar a córner. Primer aviso. El segundo lo concretó Neymar, marcando el primer gol del parido sobre la salida a la desesperada de Ospina, tras una buenísima asistencia de Suárez . 17 minutos y 50 segundos es lo que exactamente duró la resistencia del Ársenal.
A partir de entonces el fútbol fluyó como algunas de aquellas noches mágicas de cuando fuimos jóvenes. Esas noches cuyo recuerdo, ahora que ya vivimos de luz prestada, nos pone la zancadilla entre las sombras. Sobre la mitad de la primera parte, los de Luis Enrique realizaron un monumental rondo de 11 minutos y 20 segundo. El Ársenal adelantó sus líneas y en el 36, Elneny pudo marcar, pero Mathieu le tapó con autoridad.
Arsène Wegner paseaba su triste figura por la banda, ese hombre cuyo prestigio no guarda ninguna proporción con los pocos títulos que ha ganado.
La segunda parte empezó con el Ársenal muy motivado, y en el minuto 50 Elneny conectó un potentísimo disparo desde el límite del área que se coló por la escuadra de Ter Stegen. Ada Colau, por cierto, en el palco de autoridades. Yo creía que los de abajo iban al Gol Sur, se pagaban su entrada, y nunca jamás se mezclaban con la casta. ¿Pero si ya hacen como nosotros, por qué nos continúan insultando en lugar de abrazarnos?
El Arsenal insistía y el Barça también, sin ninguna intención de especular ni de congelar el partido. En el 64, el empeño azulgrana tuvo su premio cuando Suárez, en volea memorable, remató a gol un buen centro de Alves. En el minuto 83, Messi, en otra de sus genialidades, marcó el tercero.
El Barcelona hizo lo que tenía que hacer, como siempre, y también como siempre lo hizo rápido y bien. Sólo la mala suerte -que también juega- puede separar a este equipo de su segundo triplete consecutivo.
Previa
Yo fui de los que se equivocaron con Luis Enrique , y le desprecié cuando llegó al Barcelona. Pero ahí está su trabajo, y sus resultados, y la insólita madurez de un equipo que sabe lo que quiere y cómo conseguirlo. Los que alguna vez creímos que el grado de perfección al que Guardiola había llevado el fútbol de Cruyff era insuperable, no sabíamos de qué hablábamos. En parte por la genialidad de Messi, y en parte por el espíritu competitivo del técnico asturiano, su fortaleza mental y su disciplina, este Barça es de un talento y de una eficacia que el fútbol mundial nunca antes había conocido.
Luis Enrique se ha ganado el derecho a ser antipático, susceptible o borde en las ruedas de prensa. Incluso se ha ganado el derecho -aunque no se lo reconozcan- de no tener que asistir a tales conferencias. Primero porque sólo el servicio tiene que dar explicaciones, y segundo porque las preguntas de la prensa deportiva catalana son un siniestro museo de la majadería. Entre los pedantes que creen que saben de fútbol y arman grotescas teorías sobre las alineaciones y los cambios que muy pocas veces tienen que ver con el verdadero criterio del entrenador; y los que para llenar las exageradísimas páginas que cada día se dedican al Barça, recurren a preguntas sin ningún interés cuando no francamente estúpidas, es normal que Luis Enrique y cualquier persona que tenga aprecio por su tiempo, y por su inteligencia, acuda del peor humor a semejantes akelarres.
Su vanidad es ganar
Lo que la afectada prensa deportiva catalana no ha sido capaz de detectar es que Luis Enrique ha «madriñelizado» al Barça, y por eso el año pasado lo ganamos todo, y lo más probable es que este año lo volvamos a ganar. Si Cruyff quería brillar y Pep quería tener razón, el señor Martínez sólo quiere ganar . Su estilo es ganar, su vanidad es ganar, como el Madrid histórico que se lo llevó todo por delante, y sus récords más significativos todavía no han sido superados.
Luis Enrique es la síntesis entre lo mejor del Barça y lo mejor del Madrid, tiene las mejores herramientas y sabe cómo administrarlas. Acusarle de abrupto es cursi: los genios no suelen ser simpáticos y mucho menos con quienes mantienen actitudes, por decirlo suave, poco erguidas. Con mucho menos, cualquiera de nosotros sería increíblemente más arrogante, más chulo, y no se cansaría de castigar con inapelables chascos a cualquiera que se atreviera a preguntarnos desde la impertinencia. Con la cantidad de motivos que Luis Enrique tiene para ser cruel con una prensa pastelosa, redicha y vacua, es admirable la paciencia con que asiste al vergonzoso espectáculo.
Luis Enrique no tiene el narcisismo de Pep ni su obsesión por lucir hermoso en todos los espejos. Tampoco ha tenido nunca ningún interés en utilizar la sala de prensa -como hacía Mourinho- para meter presión en favor de sus objetivos. Por eso no tiene ninguna necesidad de mentir, ni de callarse lo que quiere decir , a diferencia de otros entrenadores, que en el fondo sienten mucho más desprecio por los periodistas, pero lo disimulan para poderles usar a su conveniencia.
Otra cosa distinta es que probablemente Luis Enrique sería más feliz si estuviera menos enfadado , si lograra relajarse un poco, aunque tampoco se me ocurre de qué modo la alta competición puede ser relajante. Un poco de diplomacia sin duda le ayudaría, pero el carácter no puede hacérselo uno a medida y en el reverso de nuestros defectos acostumbran a estar nuestras virtudes.
Yo fui de los que se equivocaron con Luis Enrique, y me sabe mal porque ahora es muy fácil defenderle y me hubiera gustado haber reconocido antes su talento y haberle podido ayudar cuando todo el mundo le daba la espalda. Su simpatía es la trayectoria de su equipo y lo demás palidece en el espejo de las cosas sin importancia.
Tarjeta Amarilla para Giroud [Arsenal]
Ocasión de Giroud [Arsenal], con el pie izquierdo, tras un saque de esquina. El pase fue de Özil. El balón acaba rebotando en un contrarioCentro al área de Özil [Arsenal] y remata a puertaOcasión de Giroud [Arsenal], con el pie izquierdo, de rebote. La jugada acaba con la parada del porteroOcasión de Walcott [Arsenal], con la cabeza, de rebote. El balón acaba rebotando en un contrario
Ocasión de Alexis Sánchez [Arsenal], con el pie derecho, en el lanzamiento de una falta directa. La jugada acaba con la parada del porteroTarjeta Amarilla para Arda Turan [Barcelona]
Ocasión de Rakitic [Barcelona], con el pie derecho, tras una jugada colectiva. El pase fue de Luis Suárez. El balón sale fuera lejos del larguero
Centro al área de Jordi Alba [Barcelona] y despeja la defensaOcasión de Welbeck [Arsenal], con el pie izquierdo, tras una jugada colectiva. El pase fue de Iwobi. El balón se estrella en el larguero de la portería
Centro al área de Alexis Sánchez [Arsenal] y despeja la defensaOcasión de Messi [Barcelona], con el pie izquierdo, tras una jugada colectiva. El pase fue de Neymar. El balón sale fuera cerca del largueroCentro al área de Elneny [Arsenal] y despeja la defensaOcasión de Welbeck [Arsenal], con el pie izquierdo, después del rechace de un rival. El balón acaba rebotando en un contrario
Ocasión de Messi [Barcelona], con el pie izquierdo, tras una jugada colectiva. El pase fue de Neymar. La jugada acaba con la parada del porteroCentro al área de Alexis Sánchez [Arsenal] y despeja la defensaCentro al área de Alexis Sánchez [Arsenal]
Ocasión de Alexis Sánchez [Arsenal], con la cabeza, tras una jugada colectiva. El pase fue de Héctor Bellerín. El balón sale fuera cerca del posteCentro al área de Héctor Bellerín [Arsenal] y remata a puertaOcasión de Neymar [Barcelona], con el pie derecho, tras una jugada colectiva. El pase fue de Iniesta. La jugada acaba con la parada del porteroOcasión de Elneny [Arsenal], con el pie derecho, tras una jugada colectiva. El pase fue de Alexis Sánchez. El balón acaba rebotando en un contrario
Ocasión de Iwobi [Arsenal], con el pie izquierdo, tras una jugada personal. El balón sale fuera lejos del largueroCentro al área de Héctor Bellerín [Arsenal] y despeja la defensaCentro al área de Monreal [Arsenal] y despeja la defensa
Tarjeta Amarilla para Gabriel [Arsenal] por protestar
Tarjeta Amarilla para Flamini [Arsenal]
Centro al área de Luis Suárez [Barcelona] y despeja la defensaSaque de esquina de Neymar [Barcelona]Centro al área de Luis Suárez [Barcelona] y despeja la defensaCentro al área de Jordi Alba [Barcelona] y despeja la defensa
Ocasión de Rakitic [Barcelona], con el pie derecho, tras una jugada colectiva. El pase fue de Neymar. El balón acaba rebotando en un contrarioOcasión de Flamini [Arsenal], con el pie derecho, tras un saque de esquina. El pase fue de Elneny. El balón sale fuera lejos del largueroCentro al área de Héctor Bellerín [Arsenal]Centro al área de Monreal [Arsenal] y despeja la defensa
Saque de esquina de Messi [Barcelona]Ocasión de Messi [Barcelona], con el pie izquierdo, tras una jugada colectiva. El pase fue de Neymar. La jugada acaba con la parada del porteroOcasión de Elneny [Arsenal], con el pie derecho, tras una jugada colectiva. El pase fue de Alexis Sánchez. El balón sale fuera lejos del posteCentro al área de Héctor Bellerín [Arsenal] y despeja la defensa
Saque de esquina de Özil [Arsenal] y despeja la defensaOcasión de Welbeck [Arsenal], con el pie derecho, tras una jugada colectiva. El pase fue de Özil. El balón acaba rebotando en un contrario