Ascenso
Castellón, el equipo al que la afición tenía que llenar la nevera
La desaparición, hasta la llegada de Vicente Montesinos, rondó a un histórico que asciende al fútbol de plata 10 años después ganando al Cornellá
Unos días antes del inicio del playoff en el que anoche consiguió el ascenso a Segunda división venciendo en la final al Cornellá (1-0) , la campaña de renovación de abonos del CD Castellón superaba ya los 10.000 afiliados, una muestra de la fidelidad de una afición que nunca ha abandonado a su equipo. Al menos sentimentalmente porque esa lealtad saltó por los aires en la temporada 2016-17 cuando en las gradas de Castalia lucía el cemento. Desbandaba que nada tuvo que ver con que el equipo deambulara en Tercera división, sino con la gestión de David Cruz al frente de una entidad que navegaba a la deriva. La llegada en junio de 2017 del actual presidente, Vicente Montesinos , cambió el rumbo y evitó la desaparición a la que parecía abocado un histórico que ayer, tras quince años de ausencia, regresó al fútbol profesional.
El 20 de julio de 1922, el CD Castellón celebrará su centenario y el objetivo de Montesinos y su junta es que sople las velas en el fútbol profesional, donde ha militado a lo largo de 48 temporadas, 37 de ellas en Segunda división y once en Primera. Ayer volvió a poner los pies en él gracias a un gol de Ortuño . Un ascenso inimaginable para una hinchada que hace solo tres temporadas tenía que llenar la nevera de los futbolistas ante los impagos de David Cruz. La sociedad castellonense mostró su cara más solidaria y ayudó a mantener a flote al Castellón hasta la llegada de Montesinos.
Cambio de vida
En 2010 abandonó el fútbol profesional y el Castellón inició una caída en picado que terminó arrastrándole a Tercera división, donde chapoteó en el lodo gestionado por Cruz. Un presidente capaz de despedir la Nochevieja de 2016 a Frank Castelló , técnico que tenía al equipo en puestos de ascenso.
Seis meses después, llegó el esperado cambio. El equipo no consiguió el ascenso a Segunda B, por lo que la marcha de Cruz era la única posibilidad para evitar la desaparición. El grupo encabezado por Vicente Montesinos y los futbolistas Pablo Hernández y Ángel Dealbert se hizo cargo de una entidad a la que le cambió la vida.
La afición regresó a Castalia y en la temporada 2017-18, aún en Tercera división, el club tenía ya 13.000 abonados, superando el récord de la categoría del Real Oviedo. En su primer año de mandado, Montesinos ascendió a Segunda B y empezó a estabilizar la situación económica del club.
El Castellón vuelve a Segunda con Óscar Cano en su banquillo, el técnico que la pasada temporada mantuvo al equipo en Segunda B en el año de su regreso. Castalia y el famoso grito de su gente, «Pam, Pam, Orellut», volverá a oírse en el fútbol profesional.