A Arturo Vidal se le acaba la paciencia

Vienen curvas. Sobre todo para Ernesto Valverde , que respiraba tranquilo tras una contundente victoria en Wembley ante el Tottenham sin sospechar que deberá apagar un incendio que acaba de prender en el vestuario azulgrana. A Arturo Vidal se empieza a agotar la paciencia tras el escaso protagonismo que está teniendo en el Barcelona y ya no lo esconde . Hasta el momento, el chileno había aceptado su rol de recién llegado, esperando su oportunidad y entrando poco a poco en el equipo. Pero los últimos partidos han molestado al centrocampista, acostumbrado a papeles mucho más importantes en su etapa en la Juventus o el Bayern de Múnich . El último capítulo lo ha protagonizado tras la mencionada victoria en Wembley, en la que el Barcelona rompía una mala racha de tres partidos sin ganar, daba un golpe de autoridad en la Champions y enderezaba un rumbo que preocupaba al entorno.

Mientras el equipo azulgrana celebraba el triunfo en el vestuario del mítico estadio inglés, Arturo Vidal se servía de las redes sociales para mostrar su enfado . Lo hizo a través de Instagram, plataforma en la que colgó un emoticono iracundo sin palabra alguna pero que todo el mundo entendió como su estado de ánimo tras su suplencia en un partido en el que todos daban por hecho que sería titular. Tras jugar de inicio en ante el Athletic de Bilbao el pasado fin de semana, vio como Arthur le pasaba por delante y completaba un centro del campo compuesto por Rakitic y Busquets. El entrenador azulgrana solo le permitió disputar los últimos cuatro minutos , precisamente sustituyendo al brasileño. No gustó su gesto a los pesos pesados del equipo, que se lo hicieron saber. Finalmente, el chileno rectificó y publicó un nuevo mensaje en el que felicitaba a sus compañeros por la gran victoria.

Este gesto de Arturo Vidal se suma al que protagonizó ante el Athetic de Bilbao el pasado sábado y que pasó ciertamente desapercibido. Al jugador, que era de la partida, se le transformó la cara cuando vio su dorsal en la pizarra a los 55 minutos mientras Messi esperaba en la banda para entrar. Su gesto fue inequívoco y se sintió señalado por el mal partido que estaba realizando el Barcelona. Hay que tener en cuenta que Vidal solo suma dos titularidades (Gerona y Athletic) en los diez partidos disputados y no ha completado ninguno. Jugó 5 minutos ante el Sevilla en la Supercopa de España, 6 ante el Alavés, 14 ante el Valladolid, 20 ante el Huesca, 13 ante la Real Sociedad y 6 ante el PSV antes de lograr la ansiada titularidad. Ante el Leganés no se movió del banquillo. En total suma 180 minutos (una media de 18 minutos por partido) , una cifra muy inferior a sus pretensiones cuando firmó por el Barcelona.