300 millones en el banquillo

La política de fichajes del Barcelona y la gestión que hace Ernesto Valverde de ellos no deja de ser curiosa. Si a los gestores del club azulgrana no les importa sacar la chequera para satisfacer las peticiones del entrenador, no deja de sorprender que posteriormente el preparador siga sirviéndose de los mismos futbolistas de los que disponía la pasada temporada. Al igual que un niño que pide insistentemente el helado más caro de la carta para dejárselo prácticamente entero, Valverde alineó un once ante el Alavés sin ningún futbolista de los recién llegados . Arthur, Lenglet, Malcom y Arturo Vidal fueron suplentes de lujo ante el equipo de Abelardo. A ellos se unió Coutinho , el fichaje más caro de la historia del club catalán. En total, cerca de 300 millones de euros invertidos en los últimos ocho meses.

« Lo normal es que los nuevos vayan entrando en el equipo . Tener una plantilla con jugadores que te pueden ayudar es importante», justificó Valverde tras su primera victoria en Liga. El técnico quiere una plantilla competitiva . Lo que cueste cada uno de los refuerzos no es de su competencia. Las salidas de Iniesta y Paulinho le trastocaron los planes y por ello adelantaron la llegada de Arthur , prevista para enero, que costó 40 millones (31 fijos más 9 en variables). Además, le reforzaron la defensa pagando la cláusula de rescisión de Clement Lenglet (35,9 millones), ya que no contaba con el recién llegado Yerry Mina.

Sin contar con su opinión, la dirección deportiva apostó por Malcom (42 millones), al que arrebataron a la Roma cuando iba a ser presentado en la capital italiana. Molesto, Valverde dio a entender que no era una petición suya sino una apuesta de club y lo demostró dejándole fuera de la convocatoria para la Supercopa ante el Sevilla y no dándole ni un minuto ante el Alavés. Sus dos goles en los amistosos previos no le han concedido la gracia del entrenador .

«Estoy contento con el rendimiento de todos. Se está viendo cómo participan en el juego . Ahora, en competición, hay que hacer lista y hay límite de cambios y no es lo mismo. Sabiendo eso y viendo lo que nos han dado en pretemporada y como entrenan, son jugadores que van a jugar muchos partidos este año. Estoy contento con ellos y ellos deben estar contentos también», argumenta Valverde.

El cuarto en llegar, Arturo Vidal (22 millones, 19 de ellos fijos), tampoco ha gozado de protagonismo a pesar de la insistencia de Valverde por reforzar la medular. Willian, Rabiot y De Jong eran los escogidos por el preparador, pero dio el visto bueno a la llegada del chileno. A pesar de ello, solo suma once minutos.

Un banquillo de lujo en el que también estaba Coutinho , que costó 160 millones de euros en el pasado mercado invernal. La alineación dejó clara las intenciones de un Valverde que el año pasado abusó de un once tipo, lo que le supuso críticas. « Les necesitaremos a todos», justificó el técnico .