Liga BBVA
Un Celta goleador con alma defensiva
El rival del Real Madrid de esta tarde es la sensación de la liga gracias al estilo que Berizzo ha conseguido instalar en el equipo
La fama de jugador del «Toto»Berizzo anticipaba un cambio de ciclo en el Celta . La grada esperaba un equipo más tosco y duro. Un conjunto que recordara a aquel defensa áspero que en Vigo escribió las páginas más destacadas del club gallego. Nada que ver con la realidad. Con él en la zaga, los celestes soñaron con una Copa del Rey y jugaron la Liga de Campeones . Con él en el banquillo, los sueños de grandeza que parecían olvidados se han vuelto a instalar entre la afición del club.
Porque este Celta colíder de la Liga BBVA , único invicto junto al Real Madrid, tiene lo mejor del Berizzo defensor y la filosofía ofensiva de sus maestros como técnico. La mano de aquel Víctor Fernández que convirtió al Celta en un grande de Primera o las enseñanzas de Marcelo Bielsa durante los tres años que ambos compartieron banquillo en la selección de Chile. Una época que sirvió de espaldarazo definitivo para Berizzo, que decidió volar en solitario en una carrera como entrenador que le llevó del modesto O’Higgins chileno al Celta en apenas tres años.
El panorama que se encontró a su llegada a Vigo anticipaba nubarrones después de una temporada brillante con Luis Enrique al mando. El asturiano, que había puesto rumbo al Barcelona , dejaba al equipo a las puertas de la UEFA tras seis años de problemas. El argentino tenía mucho que perder y muy poco que ganar. Pese a todo, Berizzo asumió el reto y no tardó en mejorar los números del ahora técnico azulgrana.
Octavo, con dos puntos más que el año anterior y un juego más vistoso, el Celta era ya uno de los equipos más temidos de Primera. Veloz y preciso en ataque, los celestes acuñaron un estilo propio que no varía cuando juegan lejos de Balaídos . «Nuestros objetivos no cambian cada siete días, aunque sí pensamos que podemos ganar a cualquiera, que podemos ir cualquier campo a demostrar que podemos vencer porque somos un equipo sólido, que genera mucho peligro», reconoce el técnico.
Su asignatura pendiente del año pasado la resolvió hace unas semanas con la goleada celeste al Barcelona (4-1). Su Celta, al fin, había sacado algo positivo contra uno de los grandes. Una hazaña que buscará repetir hoy ante el equipo que peor se le da desde que llegó al banquillo gallego. Siete goles recibidos y dos derrotas en dos encuentros es el balance desolador del Celta ante el Real Madrid .