Primero, otro clásico: el Ajax

La derrota del Barcelona en París, hasta el momento la única de los culés en lo que va de temporada, convierte la visita del Ajax al Camp Nou de esta noche (20:45h, TVE -1 y Autonómicas) en un compromiso más serio de lo que podía preverse.

Este sábado hay clásico y Neymar admitió en la previa que sería «mentira» si dijera que no piensa en el Madrid, pero Luis Enrique enfocó a su equipo: «Solo nos obsesiona el Ajax, lo demás no existe». No le falta razón, ya que el Barça ha empezado la Champions con más dudas que la Liga y un tropiezo ante el siempre académico combinado 'ajacied' le complicaría la vida más de la cuenta. Además, la previsible victoria del PSG ante el débil APOEL alejaría la primera plaza del grupo F.

La lista de convocados del asturiano está formada por 15 jugadores del primer equipo y tres del filial (los habituales Munir y Sandro y el mediocentro Samper). La presencia de este último responde a los problemas físicos de Sergio Busquets, que presenta, según el parte médico ofrecido por el club, «una contusión en la cadera izquierda». El internacional, baja por precaución, ya se perdió el choque del sábado ante el Éibar, aunque Luis Enrique desmintió cualquier problema físico. Por lo tanto, siguiendo la versión del técnico, se lesionó forzosamente el domingo o el lunes.

En todo caso, Busquets, aquejado desde hace meses de una pubalgia, se cae de la lista igual que los todavía lesionados Vermaelen, Adriano y Douglas, que el sancionado Luis Suárez y que Mathieu, ausente por decisión técnica con vistas al clásico. La potencia física del francés promete ser decisiva para minimizar el poderío ofensivo del Madrid.

El Barça se reencuentra en la fase de grupos de la Champions con el Ajax, un equipo que el año pasado fue capaz de derrotar a los catalanes en Ámsterdam no precisamente esperando atrás y saliendo rápido a la contra. Aquello fue una derrota moral (2-1) y esta noche el planteamiento de los de Frank De Boer irá por los mismos derroteros. Poco importará que el Camp Nou sea un escenario imponente. Atención con la potencia y precisión de Schöne a balón parado y con la presencia del islandés Sigthórsson en ataque. Ambos tendrán que dar un paso adelante para cubrir las bajas sensibles de Serero, Boilesen y Fischer.

El Ajax es un clásico venido a menos, pero no pierde su gusto por el toque.