Fórmula 1 | GP de Turquía
Remontada colosal de Sainz y toque aciago de Alonso
El madrileño termina octavo y el asturiano, decimosexto, en el triunfo de Bottas. Verstappen, otra vez líder
El toque de Gasly que arruinó la carrera de Alonso: «¡Qué tío más estúpido!»
Así va el Mundial de Fórmula 1
Turquía depara una carrera a la contra condicionada por la llovizna escasa, una humedad ambiental que altera la tarde. Es un éxito para Carlos Sainz , que remonta de manera colosal desde le penúltima plaza de parrilla a la octava. Y un día aciago para Fernando Alonso , que salía quinto y termina decimosexto por un toque fatídico con Gasly en la primera curva. En Estambul gana Valtteri Bottas, que se está despidiendo de Mercedes, con Verstappen y 'Checo' Pérez en el podio. Hamilton, quinto, cede el maillot amarillo a Verstappen.
Great work from @ValtteriBottas today 👏#TurkishGP 🇹🇷 #F1 pic.twitter.com/U24u9xfZAl
— Formula 1 (@F1) October 10, 2021
La carrera se le arruina a Fernando Alonso en la primera curva a izquierdas, muy corto el recorrido desde la parrilla. El español ataca para soñar con una tarde de felicidad y se lleva un rejón en todo lo alto porque Gasly le toca la rueda trasera izquierda cuando ya le ha adelantado. Hace un trompo el asturiano, maldice la suerte y se reincorpora en el pozo del pelotón, puesto diecisiete. Hasta luego el plan a corto plazo de intentar un podio en su regreso a la Fórmula 1. Alonso se desespera, azuza por la radio a Gasly -«lo típico de él, qué estúpido»- y recibe una sanción de cinco segundos porque también se roza con Mick Schumacher cuando lo adelanta en las posiciones traseras. Rabia total porque el sábado el español había demostrado ritmo y manos para aspirar a algo más que los puntos.
El foco del día se centra en dos nombres, dos a la remontada. Hamilton, que sale undécimo, y Carlos Sainz, que parte penúltimo. El británico se acomoda en el Mercedes volador y empieza a subir la escalera. Primero, con mucho cuidado porque Tsunoda ha demostrado que es el pequeño Hulk, tipo durísimo y pelín kamikaze. Tarda en pasar el británico en ese orbayu permanente, mitad lluvia fina, mitad oscuridad.
La pista no se seca , el asfalto no traga la humedad y el gran premio turco es una sinfonía de neumáticos intermedios, los que ni frío ni calor.
Sainz protagoniza un subidón espectacular, undécimo en la vuelta nueve, décimo en la 15. El piloto español es rapidísimo en esas condiciones, sin nada que perder, a todo o nada, pero también lo es su compañero Leclerc, quien está luchando por el podio y algo más cuando la carrera progresa hacia el ecuador. Los Ferrari tienen un ritmo brutal y Sainz se aprovecha. Adelanta a Alonso, Ricciardo, Russell, Giovinazzi, Ocon y Stroll. Magnífico el madrileño. Se esperaba en Turquía a Alonso, su mejor versión, y llega Sainz supersónico.
Vettel se aventura con los neumáticos lisos, los medios, y su experimento le sirve a todas las escuderías. El alemán de Aston Martin es un patinador sobre el asfalto deslizante, imposible correr con ese calzado. Todos proceden a cambiar sus ruedas verdes.
Hamilton adelanta con cuidado . Se lo puede permitir su experiencia y su coche superior. No quiere un cero en su casillero ahora que se está jugando el octavo título, más que nadie en la historia, con Verstappen. Tampoco el holandés arriesga, quiere sumar y no restar a falta de seis carreras.
No hay noticias de Alonso, descolocado en la decimosexta posición después de un toque aciago para sus intereses. Sainz, sin embargo, se crece pese a que su parada en el box es un desastre de lentitud otra vez. Hace tres vueltas rápidas consecutivas antes de que llegue Hamilton con gomas nuevas.
Momento clave del GP es el freno que supone 'Checo' Pérez para Hamilton cuando llega a su altura. El mexicano se gana el sueldo en Red Bull como secante del británico en favor de Verstappen. Hamilton se bloquea por ahí, vuelve al garaje y acaba quinto, de tal manera que Verstappen vuelve a ser líder del Mundial.