Vettel hace feliz a Ferrari

Sebastian Vettel prosigue su idilio con Ferrari. El alemán consiguió su tercera victoria de la temporada para delirio del cavallino. Siempre que fallan Hamilton y Mercedes, ahí está Vettel para arañar algo. En el circuito nocturno de Singapur se derrumbó el Mercedes. Hamilton tuvo que abandonar por primera vez en el curso después de un fin de semana calamitoso. Igual de malo fue el desenlace para Fernando Alonso. Cuando estaba octavo y en los puntos, se retiró por un problema en la caja de cambios del McLaren. Es un drama la campaña de McLaren.

La carrera de Singapur fue como siempre larga y llena de incidentes. No en la salida, que por una vez se desarrolló con normalidad y sin toques. Vettel solo tuvo un adversario: el muro de contención del circuito. Ricciardo, aunque con buen ritmo, estuvo siempre lejos del alemán, que dominó antes, durante y después de la salida de dos coches de seguridad.

Alonso soñó con los puntos otra vez, pero fue un espejismo. Nada funciona en el McLaren asociado al motor Honda. Esta vez fue la caja de cambios la que lastimó una tarde que se prometía al menos productiva para el español. También Button tuvo que marcharse por el mismo problema.

Carlos Sainz participó en numerosas luchas y acabó noveno en una plaza meritoria, aunque perdió la pelea que más daño le hace. Su compañero Verstappen fue octavo, justo por delante y después de desobedecer las órdenes del garaje que le indicaban que dejase pasar al español por una estrategia de equipo.