Ciclismo
Javier Guillén: «Mi receta es no bajar la guardia y mantener la ilusión»
El sector de los organizadores deportivos vive tiempos muy difíciles. En realidad, como todos los segmentos sociales porque no hay uno que escape a la virulencia de la crisis. Solo existe incertidumbre y desconocimiento respecto a los plazos que puede marcar el maldito coronavirus. Cada día se ha anunciado en nuestro país la anulación de algún evento deportivo y, aunque los esfuerzos por reubicar la competición en otras fechas serán arduos, casi se puede dar por perdido un año con la Eurocopa y los Juegos Olímpicos en el escaparate. Javier Guillén organiza la Vuelta a España, prueba que de momento ha esquivado los negros presagios por una cuestión cronológica. Se celebrará, si se puede, del 14 de agosto al 6 de septiembre. En estos días angustiosos y de noticias negras, Guillén evita el tono catastrofista y confía en actitudes prácticas.
«¿Va a quedar un solar si dura mucho esto? Pues intentemos entonces entre todos que dure lo menos posible ».
Javier Guillén teletrabaja con su equipo en Unipublic para garantizar que la Vuelta se desarrolle en condiciones de normalidad. Reuniones a cutro por whatsapp, videoconferencias, Skype y otras aplicaciones son su rutina diaria en estas fechas.
«Nadie, ningún organizador, quiere suspender su carrera, su torneo o su liga -comenta a ABC-. Entre otras cosas porque no es una decisión del organizador. Las autoridades sanitarias, el Gobierno de España y la realidad social nos marcan el camino que debemos seguir todos. La cancelación es lo último que desea un responsable deportivo».
El coronavirus ha pulverizado la primavera deportiva. En el ciclismo la actividad se ha paralizado desde hace semanas. Solo la París-Niza (a finales de febrero) pudo llegar a puerto aun cancelando la última etapa. El pelotón está parado y, en España, sin posibilidad de entrenar al aire libre. El Giro anuló la salida de Hungría y espera al 4 de abril (cuando cumple el plazo de emergencia decretado en Italia) para tomar una decisión sobre si cancelarlo o no. El Tour de Francia aguarda acontecimientos antes de pronunciarse sobre su carrera (empieza el 27 de junio). ASO, la sociedad matriz del Tour y otras carreras, ya ha suspendido la París-Roubaix, la Flecha Valona y la Lieja-Bastoña-Lieja.
«Si me preguntas hoy, yo creo que la Vuelta a España sí se va a celebrar -responde Guillén-. Nosotros trabajamos igual que siempre. Y en estos momentos mi receta es no bajar la guardia, mantener la ilusión y adelantar trabajo. Así se lo transmito a mi equipo. La gente tiene ganas de deporte porque esto es dramático, y por supuesto quiere que se corra la Vuelta».
La Vuelta, que estos días se denomina en las redes sociales La Vuelta (en casa), saldrá de Utrecht. «En Holanda han tomado medidas de emergencia muy similares a las nuestras. Hay que seguir trabajando, no podemos hacer nada más. Cuanto antes hagamos los deberes ciudadanos, antes saldremos de esta ».
Reordenar el calendario
Suceda lo que suceda con las carreras ciclistas, la congestión se puede producir a finales de verano y en otoño. Muchas competiciones deportivas de todas las modalidades se han aplazado para esas fechas en un intento de salvar presupuestos y la temporada. El director general de la Vuelta no lo ve claro: «Reubicar a tantos deportes en el calendario va a ser muy difícil. Por supuesto, no es solo el ciclismo. Hablamos de todos los deportes. No podemos obviar que el efecto televisivo marca nuestra actuación y la televisión no puede emitir todos los deportes a la vez , los mismos fines de semana a la misma hora. Lo veo algo complicado».
Las encuestas y las audiencias son el motor de la dirección de Guillén en la Vuelta. La televisión manda porque es la que paga, se podría resumir. «Efectivamente hay que ser realistas. No es solo mi deporte, sino muchos otros con sus intereses diversos. Las televisiones viven del público y nosotros de la publicidad . No sé si las parrillas de televisión pueden absorber tal cantidad de eventos en otoño».
«El ciclismo no es un deporte en el que puedas cambiar de estadio y arreglado. Nuestro escenario son las vías públicas , movilizamos a las fuerzas de seguridad y dependemos de la meteorología. No es lo mismo el ciclismo en verano que subiendo puertos en invierno».
El ciclista Iván Cortina deslizó la idea romántica de organizar una supervuelta por Italia, Francia y España en caso de anulaciones de Giro, Tour o Vuelta. Guillén se pronuncia. «Como idea es bienvenida y como debate se puede aceptar, pero es totalmente inviable».