Giro de Italia

El Giro alcanza la alta montaña con incertidumbre

El positivo por coronavirus de Yates y la falta de un líder claro enciende la tensión en el pelotón

E. V. E.

La jornada sabatina del Giro de Italia aparecía sobre el papel como un remanso de paz. Tras haber firmado la etapa más rápida de la historia el viernes, el pelotón esperaba una jornada de transición a la espera de la llegada de la alta montaña el domingo, pero el positivo por coronavirus de uno de los aspirantes al triunfo final sacudió la carrera desde primera hora de la mañana.

Fue entonces cuando la organización confirmó que Simon Yates no tomaría la salida tras haberse confirmado su contagio la noche anterior. La noticia recorrió cada rincón de la salida y se convirtió en la comidilla del día dentro del pelotón. Yates, que sufrió una ligera febrícula a última hora del viernes, dio positivo en un test rápido y fue rápidamente aislado a la espera de una segunda prueba que confirmó el contagio. Una vez trasladado fuera de la burbuja y hsopitalizado, el Giro llevó a cabo varios test para comprobar si alguno de los miembros de su equipo, el Michelton Scott , también sufrían la enfermedad. Por fortuna, todos dieron negativo, lo que alivió la presión sobre la carrera y permitió que la salida se tomara ayer con cierta normalidad. Aun así, el runrún fue constante durante toda la jornada dentro del pelotón.

El de Yates es el primer positivo de un ciclista en una gran vuelta. No hubo ningún contagio ciclista en el Tour de Francia, que pudo disputarse sin sobresaltos hace algunas semanas, y tras el abandono de Yates el Giro confía en que no haya ninguno más por esta causa. «Todos queremos llegar a Milán. Es nuestro objetivo. El de Yates es el primer caso después de diez días y creo que el protocolo sanitario que hemos implantado ha funcionado bien. Si solo hubiéramos seguido el de la UCI -algo menos restrictivo- habríamos tenido que esperar al resultado de la prueba el domingo, con el consiguiente peligro de expandir el contagio. Creo que nuestro sistema de pruebas rápidas está funcionando muy bien», señaló Mauro Vegni, director del Giro, en la televisión pública italiana.

En cualquier caso, no será hasta la jornada de descanso del lunes cuando el pelotón pueda respirar definitivamente . Ese día está previsto que todos los integrantes de la ronda pasen un PCR para confirmar si son aptos. Un proceso rutinario que se ha cargado ahora de incertidumbre y que podría acabar con la cancelación de la carrera si se confirman más positivos.

Mientras tanto, los ciclistas se dieron ayer un respiro en una etapa tranquila que ganó Alex Dowsett . El triunfo del británico es el primero en una gran ronda del «Israel Start-up Nation», equipo que ha fichado a Chris Froome para la próxima temporada. Hoy, primer final en alto con recorrido exigente en el que los favoritos -entre los que se encuentra el español Pello Bilbao - deberán mostrar su valía.

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