Egan Bernal y la estirpe de los escarabajos colombianos

Es el deporte rey en Colombia y ellos son la esencia de un pueblo. Los ciclistas colombianos son los protagonistas del libro «Bernal y los hijos de la cordillera», que ha publicado el periodista francés Guy Roger, tantos años especializado en el deporte del pedal para el diario 'L'Equipe'. Un retrato pormenorizado de las andanzas de los antiguos escarabajos que llegaron a Europa con una mano delante y otra detrás, hasta la actualidad, en la que un profesional bien preparado como Egan Bernal acaba de ganar el Giro de Italia después de su éxito en el Tour de Francia 2019.

Con testimonios de primera mano y una pormenorizada investigación recorriendo carreteras y ciudades el país cafetero, Guy Roger profundiza en los orígenes del ciclismo colombiano, el que manda en la actualidad en el pelotón. Parte del fenómeno Egan Bernal y retrocede hacia los ancestros en orden cronológico hasta los años 50.

Repasa un variopinto elenco. Cochise Rodríguez es el que inauguró la estirpe de los escarabajos, al aterrizar en Europa de la mano del mismo hombre que sigue trayendo ciclistas sudamericanos, Gianni Savio, el italiano siempre sonriente y de trato afable.

Vinieron luego Patrocinio Jiménez y Edgar 'Condorito' Corredor, tripulantes de aquel Teka que adiestraba el empresario Santiago Revuelta. Lucho Herrera, rey de la montaña del Tour, que explotó en la época de Bernard Hinault, ganó la Vuelta a España (1987) y fue secuestrado por las FARC.

Roger realiza entrevistas con Herrera, Fabio Parra, 'Chepe' González, Omar Hernandez, Rafael Acevedo, Nelson 'Cacaíto' Rodríguez, Pablo Wilches, Patrocinio Jiménez, Pacho Rodríguez, Henry Cárdenas, Santiago Botero, Juan Mauricio Soler, Martin Ramírez y Alvaro Mejía. Y concluye con los actuales, Nairo Quintana, hijo de la miseria rural del Boyacá, o Egan Bernal, el Cóndor de Zipaquirá.

Y repasa situaciones complejas, como la vinculación de los narcos con el ciclismo (Pablo Escobar llegó a patrocinar un equipo para blanquear dinero), la violencia (Alirio Chizabas salía a entrenarse con una pistola por miedo a los robos) o la sombra del dopaje.