Arnaud Demare es el velocista del Giro

Pasan los días en el Giro y hay apellidos que se imponen por visibilidad, virtudes o éxitos. Es el caso de Arnaud Demare, francés de 29 años, campeón de su país, esprinter cualificado pero no dominante, que en Matera, al sur de Italia, grabó su nombre en la sexta etapa. Lleva dos en seis días el galo. Por milímetros lo consiguió frente a Peter Sagan y de manera apabullante este jueves, tan poderoso que no pareció un esprint.

A la espera que la montaña decrete otra realidad, asome la nariz de algún favorito y el Ineos compruebe si no fue una charlotada descolgar a Filippo Ganna con Geraint Thomas el día del Etna (perdió quince minutos), el Giro discute cuestiones secundarias. No hay una gran participación y la carrera gira en torno a Peter Sagan.

El eslovaco vuelve a defender su opción de ganar la clasificación de la regularidad, la popular maglia ciclamino , y ahora le cuesta. Debe desplegar la fuerza del Bora para trabajar en los esprints intermedios y ya no conquista este tipo de maillot con la facilidad que lo hacía en el Tour.

En la meta, se descolocó y perdió la opción de disputar la victoria ante Demare, cuya arrancada fue pata de mula . Tan vigorosa y potente que fue como un ataque de montaña, cogiendo metros y dejando de rueda a sus adversarios. No es el año de Sagan, también perdió la maglia ciclamino al clasificar octavo en meta.