Ciclismo
Adiós al descenso más terrorífico del ciclismo
El Giro de Lombardía elimina la bajada del Sormano, donde se accidentaron de gravedad Evenepoel, Gilbert, Bakelants o De Plus
Hay equipos que se replantean el final de temporada y ciclistas que respiran con alivio después de que se conociese este martes la decisión de los organizadores del Giro de Lombardía, la empresa RCS que también es dueña del Giro de Italia y del periódico 'La Gazzetta dello Sport'. El sábado 9 de octubre en Lombardía, quinto monumento de la temporada de clásicas del ciclismo, no se pasará por el descenso del Muro de Sormano, la bajada más terrorífica de este deporte.
El recorrido, siempre espectacular, montañoso y divertido de la prueba, viajará desde Como a Bérgamo, siempre franqueando la zona de los lagos del norte de Italia y las montañas que dan acceso a los Dolomitas. Serán seis subidas. Se comienza por el Ghisallo y ya en la provincia de Bérgamo se escalan la Roncola (con pendientes de hasta el 17 por ciento), Berbenno, Dossena, Zambla Alta y Passo di Ganda. Un total de 239 kilómetros con un desnivel vertical de 4.400 metros .
Y lo mejor para los corredores, no se sube ni, sobre todo, se baja el Muro de Sormano. Esta colina es un fetiche para los seguidores del ciclismo, con sus escasos 2,4 kilómetros, un desnivel de 300 metros, una pendiente media del 12 por ciento y un pico máximo del 24 por ciento. Después de un período de abandono, fue pavimentado y cerrado al tráfico motorizado. En 2012 regresó al Giro de Lombardía después de 50 años de ausencia. Nibali tiene el récord de la subida, 22min y 23seg.
Otra cuestión es el descenso. El último vencedor, el danés Jakob Fuglsang, lo calificó de «aterrador». Se trata de un tramo de doce kilómetros, estrecho, muy empinado, con curvas muy cerradas y de piso rugoso, con un grado de inclinación medio del siete por ciento. Pero esconde franjas de desnivel del 34 por ciento, 28, 25 y 24 por ciento. Una pared cuesta abajo. El colombiano Egan Bernal tiene el mejor registro del descenso, 12min y 53seg.
Pero la cara B del Sormano han sido los accidentes. Tremendos golpes que han provocado el terror en el pelotón hasta el punto de que el año pasado, Davide Bramati, director del Deceuninck, aseguró: «Voy a decirle a mis colegas que nunca hagamos Lombardía otra vez . No es agradable para un director deportivo cuando ves la bicicleta tirada en la carretera y no sabes dónde está el ciclista».
Vino a cuento esta afirmación por el accidente del prodigio belga Remco Evenepoel , quien desapareció, como tragado por la tierra, en un puente a derechas de la carretera. Evenepoel se fracturó la pelvis, tuvo una fuerte contusión en el pulmón y cerró su temporada.
El campeón del mundo de 2012, el belga Philippe Gilbert , sufrió la consecuencia del peligro, con una caída que lo dejó maltrecho en el Sormano. Jan Bakelants y Laurens de Plus también cayeron en el mismo descenso en 2017.
El único español que ha ganado el Giro de Lombardía ha sido Purito Rodríguez , quien venció en 2012 y 2013 en una prueba que se adaptaba perfecta a sus características de escalador explosivo.