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Salva Ballesta, fuera: la desastrosa etapa del maño al frente del San Fernando

El técnico no ha dado con la tecla para lograr buenos resultados, ha desesperado a la afición construyendo a un equipo plano en ataque y se va dejando a los azulinos en puestos de descenso

Salva Ballesta, cabizbajo durante el San Fernando - Algeciras del pasado sábado Antonio Vázquez

Pablo Vallejo

Fin a la era Salva Ballesta en el San Fernando. El maño ha protagonizado una etapa corta e intensa en el banquillo azulino, que ha desembocado en la desesperación más absoluta de la afición y en los peores resultados posibles a nivel deportivo. Y la derrota ante el Algeciras en casa fue la gota que colmó el vaso. Un fracaso del técnico que, desde su aterrizaje con mucha fuerza a nivel comunicativo, había levantado sospecha entre ciertas aristas de la afición por lo pobre de su juego y la falta de reacción durante los encuentros, además de por su experiencia más reciente.

Dicho y hecho. Esta versión de Salva Ballesta se ha parecido mucho más a la protagonizada en el UCAM Murcia , donde consumó el descenso de los universitarios a Segunda Federación tras sumar 16 de 48 puntos posibles, y nada que ver con la que vimos hace dos temporadas en el Algeciras. Allí, Salva sí logró imprimir su carácter en los jugadores y se quedo a un pasito de ascender a Segunda División. En el Iberoamericano, donde debía confirmar que se parece más al balance algecireño que al murciano, ratificó que, sin el aspecto anímico, su propuesta sobre el césped es tremendamente pobre.

Y eso que su inicio en el banquillo azulino no fue nada malo.   Al revés, fue muy bueno. Sustituyó a Nacho Castro tras la disputa de la jornada 4 y parecía que su llegada surtía efecto. Empató en casa frente al Sanse y, a la semana siguiente, fue capaz de conquistar Riazor. La racha continuaba y, tras ganar a la Balona en casa, se comenzaba a confirmar una dinámica bastante positiva. Nada más lejos de la realidad. El equipo ya daba síntomas de irregularidad y ésta fue tangible en las siguientes jornadas . A excepción de la victoria por 3 a 0 ante el Fuenlabrada en el Iberoamericano - donde los azulinos mostraron su mejor cara del curso e ilusionaron con que fuera un punto de inflexión -, Salva Ballesta no ha logrado competir al máximo en una categoría que destaca por su tremenda igualdad.

En la mayoría de encuentros, el bloque azulino se ha caído en la segunda mitad. De hecho, con el maño en el banquillo, los azulinos han encajado diez de los catorce goles recibidos en este tramo tras la reanudación. Es decir, Salva ha perdido hasta un total de 11 puntos después de dar la charla y ajustas piezas en el descanso. Algo inexplicable. Una sensación tan extraña como ver que la que supuestamente es la mejor virtud del técnico no se transmite. Cierta apatía y esterilidad en el juego de un equipo que, ahora mismo, está en problemas.

Porque Salva Ballesta se va dejando al equipo en puestos de descenso. El San Fernando ocupa la 16º posición en el Grupo I de Primera Federación. Está a tan solo un punto de la Real Balompédica Linense, que marca la permanencia, y se aleja hasta 13 unidades del Deportivo de la Coruña, quinto clasificado y en zonas de playoff de ascenso a Segunda.

Ahora, desde el club, David Vizcaíno debe acertar en su decisión. Será el tercer entrenador que pase por el Iberoamericano esta temporada y las vidas se agotan. El cese de Salva Ballesta aún se ha oficializado desde el club, pero es un secreto a voces. Según el periodista José Cabezas, el técnico maño se despidió en la mañana del domingo de los jugadores y no ha puesto ningún problema para pactar su salida. Además, comenta que será Pedro Ríos , actual director institucional del San Fernando, el que se encargue de los entrenos para preparar el duelo ante el Talavera mientras se profundiza en la búsqueda de un sustituto. La terna es amplia, por lo que la decisión puede no ser inmediata. Se avecinan nuevos cambios en el Iberoamericano.

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