Euroliga
Un Madrid gigante sella su pase a la Final Four
Los blancos, con otra exhibición ante el Maccabi, se convierten en el primer equipo que se clasifica para la cita de Belgrado
Crónica
El Real Madrid tomó ayer la Mano de Elías y luchará por ganar la Euroliga en Belgrado. Los blancos sellaron su pase a la Final Four tras ganar al Maccabi. La séptima de diez posibles desde que Laso llegó al banquillo. La más inesperada de todas, pues llegaba el equipo deshecho a cuartos de final, de donde sale reforzado después de protagonizar tres exhibiciones consecutivas ante el gigante israelí.
En Tel Aviv, con una grada entregada, el Madrid mostró de nuevo una versión poderosa y sólida. Desconocida en los últimos meses. No tuvo fisuras el equipo de Laso , que salió sin miedo a un escenario temible. La defensa, por donde ha ido creciendo en las últimas semanas, fue de nuevo la mejor virtud del equipo, que pudo explotar la velocidad al contragolpe y amasar sus primeras ventajas (14-22, min. 8).
Tavares era un gigante en la zona, por donde era imposible transitar sin llevarse un tapón del caboverdiano. Intimidación que descargó toda la responsabilidad del ataque amarillo en los brazos de Wilbekin. El base era el único sostén del Maccabi , enredado en la maraña defensiva tejida por Laso. Un sistema solidario que solo encontraba respuesta en el americano, que al descanso sumaba ya 16 puntos.
En el Madrid, todos aportaban, en un esfuerzo coral que no tuvo esta vez altibajos. La segunda unidad, comandada por un Llull excepcional (18 puntos) , agrandó la diferencia y mandó al Maccabi al rincón de pensar tras acabar el segundo cuarto (41-51). El rostro de Laso camino del vestuario dejaba entrever una mueca de felicidad contenida. Estaba feliz el técnico con lo visto durante la primera mitad, pero las dudas por las deconexiones vividas en el pasado reciente le hacían ser precavido.
Gigante Poirier
Dudas que ya no tiene este equipo , desterradas con la misma violencia con la que se instalaron semanas atrás. Porque cuando más complicado lo tenía, volvió a asomar su mejor versión. El orgullo y el corazón sobre los que se han asentado buena parte de los triunfos de la última década.
Apretó el Maccabi nada más volver del descanso y supo sufrir esta vez el Madrid. Un parcial de 9-0 estrechó la diferencia y la dejó a cinco puntos (46-51). Al arreón israelí se le sumó la cuarta falta de Tavares, pero no le temblaron las piernas al Madrid. No a este Madrid renacido de las cenizas en el que todos han dado un paso adelante. No falló Poirier, que cumplió con creces en la ausencia del caboverdiano. Magnífico el francés una vez más. Pieza clave en la resurrección y fundamental si los blancos quieren aspirar al título en Belgrado.
Wilbekin (22) y Nunnally (17) no fueron suficientes para despertar al Maccabi, que nunca estuvo ya en disposición de luchar por la victoria. Triunfo que convierte al Madrid en el primer clasificado para la Final Four, donde espera ya rival que podría ser el Barcelona. Los azulgranas, con la serie empatada, juegan hoy su primer envite en Múnich (20.30 horas, DAZN).