Fase final ACB
Unicaja despide con victoria una temporada agridulce
Crónica
El Unicaja de Málaga cerró la temporada 2019-20 con una trabajada victoria ante el Retabet Bilbao Basket (78-65) en la quinta y última jornada de la fase de grupos del 'playoff' de la Liga Endesa, un partido intrascendente para el grupo A tras las clasificaciones de Barça y Baskonia.
Unicaja soñó con el pase hasta el pasado martes, pero la derrota del Joventut ante Iberostar mandó al traste el billete a semifinales . Los jugadores de Luis Casimiro saltaron al parqué este jueves tan solo con el honor en juego y con la intención de abrochar el curso con un triunfo que dejase buen sabor de boca.
Y los andaluces cumplieron en un partido serio, sin la agresividad que ofrece la tensión de un pase a 'semis', pero con la capacidad para tener controlado al cuadro bilbaíno. Adams y Brizuela , que firmó algunas acciones de mucho talento, pusieron su calidad al servicio de Unicaja para firmar las primeras rentas (20-13) a su favor.
Los de Álex Mumbrú no se dieron por vencidos y tanto Balbin como Rousselle llevaron a remolque a los suyos durante varias fases del choque. La primera le permitió equilibrar el marcador con un 0-6 de parcial que esperanzó a los 'hombres de negro'. El descanso dejó un 42-39 con todo por decidir. Todo, sobre el propio partido, porque el resto de la historia ya estaba escrita.
Unicaja apretó en defensa, corrió bien al contraataque y cocinó varias jugadas que secaron al Bilbao. Waczynski -que negocia su renovación para la próxima temporada- alargó el colchón a un 61-48 que dejaba el triunfo mucho más cerca para los de Casimiro y en el último cuarto también fue el encargado de dar la puntilla con un triple de siete metros.
El final dejó la despedida de Rafa Martínez , quien todavía no ha anunciado su retirada, pero sí que dejará el Bilbao Basket. Una de las 'instituciones' de la ACB medita continuar a sus 38 años. El valenciano dejó la pista entre aplausos de sus compañeros y también los del rival, cuyo banquillo se puso en pie para despedirlo.
De esta forma se alcanzó el bocinazo final. El Bilbao dice adiós con una sola victoria, mientras que los malagueños terminan la fase extraordinaria con tres en cinco partidos, una cifra insuficiente -sin embargo- por el bagaje de Barça y Baskonia. Además, este será el año donde Unicaja recuperó su presencia en una final al proclamarse subcampeón de la Copa del Rey, algo que no había sucedido en la última década. Un año claroscuro para los malagueños.
