Final Eurocup
El Valencia Basket cae en Berlín y se jugará el título en La Fonteta
Crónica
El Valencia Basket tendrá que sufrir un poco más para celebrar su cuarto título de la Eurocup. La derrota en Berlín ante el Alba de Aíto García Reneses obligará al conjunto naranja a ganar en el tercer y decisivo encuentro (próximo lunes, en La Fonteta). Ahí no habrá margen para errores como los que le condenaron en Berlín durante un encuentro igualadísimo y tremendamente angustioso, prórroga incluida.
No hubo relajación en el Valencia pese a la victoria en el primer partido. El equipo dirigido por Jaume Ponsarnau dejó claro desde el inicio que había viajado a Berlín a levantar un título. Cinco triples de ocho intentos firmó el equipo valenciano en un primer periodo en el que bombardeó al Alba. El equipo alemán siguió vivo gracias a la sapiencia de Aíto, quien paró la sangría con un tiempo muerto provindencial que equilibró el choque.
Desde entonces, los alemanes se sostuvieron en el encuentro gracias al juego interior de Sikma, exjugador del Valencia y MVP del torneo, y del brillante base islandés Martin Hermannsson, letal en las penetraciones a canasta. La igualdad fue extrema. Ninguno de los dos equipos superó la barrera de los siete puntos de ventaja en todo el partido y el encuentro fue ganando en imprecisiones y nervios según se acercaba el final. Cada canasta había que sacarla con tenazas. En el Valencia Basket tardó en aparecer alguien que tirara del carro. Will Thomas aportó dos fogonazos, pero no fue hasta el último cuarto cuando la figura de Sam Van Rosson se hizo gigante. El belga anotó seis triples en ese último periodo que espolearon al conjunto naranja. Pero ni siquiera su enorme acierto consiguió despegar al Alba. Los alemanes demostraron más cuajo en el momento decisivo y consiguieron llevar el encuentro a la prórroga.
Ahí, un arranque letal, con sendos triples de Sikma y Giedraitis, fue una piedra demasiado pesada de levantar para el Valencia Basket, a quien el acierto de Van Rossom, le resultó insuficiente. Aíto supo mantener a su equipo con vida en el alambre y el Valencia aún tendrá que sufrir para levantar un nuevo trofeo continental.