CSKA-Real Madrid
El Real Madrid cosecha otro fiasco en Moscú
Los blancos caen de nuevo en casa del CSKA, donde no ganan desde 2008, en un partido dominado por De Colo y Teodosic
Crónica
Hace años que el Real Madrid no gana en Moscú. Ocho, para ser exactos, y subiendo. Cinco derrotas consecutivas las que se unió una nueva decepción más ayer, en un partido en el que los blancos dieron la cara durante tres cuartos, pero en el que acabaron claudicando ante la maestría de Nando De Colo , quizá el mejor jugador que hay ahora mismo en Europa.
Comenzaron bien los blancos, con Sergio Rodríguez manejando a la perfección el ritmo del partido y encontrando con mucha facilidad a sus compañeros. El canario movía la pelota con sentido, veloz e imaginativo, y tenía a Ayón como su socio más importante . El mexicano –10 puntos al descanso– obligó a Itoudis a relevar a sus hombres interiores y por ahí empezó a atascarse el conjunto blanco. La movilidad de Vorontsevich y Hines puso en muchos problemas al juego interior del Real Madrid y encedió los nervios de Laso en la banda. De hecho, más de los 50 puntos anotados por el CSKAen el primer tiempo llegaron desde debajo de la canasta.
Las facilidades defensivas del Real Madrid pusieron el choque muy cuesta arriba y eso que Doncic –abroncado por Laso nada más salir a la cancha– había anotado tres triples consecutivos antes del descanso para alivio visitante (50-41).
Festival de De Colo
Para entonces, el francés De Colo ya había lanzado mensajes de advertencia al banquillo madridista, pero fue tras el descanso cuando terminó por destaparse con una actuación tremenda, que le confirma como uno de los jugadores del momento en Europa. El base, ante el que nada podía hacer Rodríguez, anotaba con una pasmosa facilidad, haciendo inútiles los triples de Rivers. La distancia, antes de entrar al último cuarto, seguía siendo importante (71-64), pero asumible para un Real Madrid que iba a más en defensa.
El CSKA, que para entonces vivía de la inspiración de De Colo, vio cómo Teodosic y Hines se sumaban a su causa. Suficiente para acababar con la ya por entonces débil resistencia blanca, que bajó los brazos y se dejó ir rumbo a una nueva derrota en Moscú, la primera de este Top 16 en el que deberá mejorar mucho para estar en cuartos.