El nuevo rey de la NBA quiere acabar con el sueño del «hijo pródigo»

LeBron James volvió a Cleveland después de su exitoso paso por Miami con un único objetivo: hacer campeón al equipo de su tierra. Desterrar la imagen de frustración que le persigue desde que en 2007 llegara con los Cavaliers a la final sin haber podido consumar su sueño.

Doble campeón de la NBA con los Heat, LeBron varió su rumbo de manera drástica el pasado verano. Dejó Miami por Cleveland . Cambió la estabilidad por la ilusión de un proyecto que tardó en arrancar, pero que ha llegado a su destino. A pesar de las dificultades -la última en forma de lesión de Kevin Love-, el conjunto dirigido por David Blatt se ha plantado en las finales con más facilidad de la esperada y aspira a todo frente a los grandes favoritos para lograr el anillo.

Los Warriors, que no contaban para nadie al principio de temporada, son el gran referente de la liga tras una fase regular impresionante en la que Stephen Curry ha brillado por encima del resto. El nuevo rey de la liga, elegido MVP por delante de LeBron James , quiere certificar ese dominio con un anillo, el primero para él, que sería el cuarto para la franquicia.

Han pasado 40 años desde que los Warriors lograran su último entorchado. Desde entonces, el equipo había atravesado por un desierto de resultados que ha desembocado en este exitoso 2015. Curry ha sido su hombre más importante, pero no el único. A su lado, Klay Thompson (duda hasta última hora para las Finales por lesión) se ha destapado como uno de los mejores tiradores de la liga y junto a Draymond Green han formado un trío de garantías sobre el que Steve Kerr ha cimentado su proyecto. Secundarios como Barnes, David Lee o Iguodala han solidificado un sueño que está a punto de hacerse realidad.

La final de la NBA se disputará con el formato de 2-3-2, al mejor de siete partidos, con los dos primeros y los dos últimos en casa de los Warriors, que comenzarán con el factor cancha a favor. Romper esa ventaja es la primera misión de los Cavaliers, que no podrán contar con Kevin Love y que lo harán con un Irving a medio gas.

Con ese panorama, la figura de LeBron James se agranda. Él ha sido el principal responsable de que los Cavaliers hayan arrasado en los playoffs del este (solo han perdido dos partidos de los 12 disputados para llegar a la final). Junto a él, Blatt ha elevado el nivel competitivo de hombres como J.R. Smith o Mozgov, aunque la clave para intentar el asalto al anillo está en la mejora de su bae titular, un Kyrie Irving que arrastra problemas en una rodilla.