El desplante del dueño de los Knicks a un aficionado: «Hazte de los Nets»

No está siendo la mejor temporada de los Knicks , que en su histórico derrumbe como equipo de éxito de la NBA, sigue dando pasos hacia el abismo. La llegada de James Dolan a la presidencia no cambió esa cuesta abajo, al contrario. A pesar del fichaje de Phil Jackson como director de operaciones y la renovación de Carmelo Anthony, el equipo sigue sumido en una crisis deportiva de la que no tiene visos de salir.

En medio de ese espiral, un veterano aficionado de la franquicia decidió enviar un correo electrónico a Dolan, criticando su gestión y haciéndole ver el daño que, en su opinión, le estaba haciendo a los Knicks.

El dueño de los Knicks, James Dolan, decidió responder el correo electrónico. Hasta ahí, todo correcto. El problema fue el tono que utilizó en la respuesta, desagradable hasta tal punto que ha provocado la crítica de buena parte de la afición, que ahora se siente identificada con Irving Bierman, el seguidor de 70 años, que aún no entiende el correo que recibió de parte de Dolan hace unas horas.

«Mr. Bierman, es usted una persona triste. ¿Cómo alguien podría escribir un correo tan odioso? No lo sé, pero imagino lo desastrosa que puede ser su vida. ¿Ha hecho algo bueno en su vida? Apuesto que no. De hecho, estoy convencido de que usted es una fuerza negativa para todo lo que hay a su alrededor. Lo más probable es que hay convertido a sus familiares en unos miserables. Quizá es hasta alcohólico. Yo acabo de celebrar mis 21 años de sobriedad. Debería probar a hacer lo mismo. Eso podría ayudarle a ser una persona con las que los demás quisieran estar. Mientras tanto, puede empezar a ser aficionado de los Nets, porque los Knicks no le quieren», escribió James Dolan en su respuesta a Bierman.

Palabras durísimas que han envuelto en polémica al dueño de los Knicks y que amenazan, incluso, con una posible sanción por parte de la NBA , que siempre se ha tomado muy en serio la relación entre los propietarios y los aficionados de las franquicias. Pase lo que pase, lo que es seguro es que Dolan ha perdido parte de la confianza que aún le podía quedar como propietario del equipo.