Unión Internacional de Peñas del Atlético: «La vuelta del escudo vale más que ganar una Champions»
Los representantes de la comisión social del club rojiblanco, eufóricos tras el triunfo en la votación
El Atlético hace oficial la vuelta del anterior escudo a partir de julio de 2024

Eduardo Fernández (69) es el presidente de la Unión Internacional de Peñas del Atlético de Madrid, que agrupa a más de 300 peñas colchoneras en todo el mundo. Es, además, el coordinador de la comisión social del club, nacida justo ahora hace un año. Por lo que es una de las voces más acreditadas para transmitir cómo ha sido todo este proceso en el que la afición rojiblanca ha logrado recuperar su escudo, el que consideran legítimo, el que les representa, el que había sido símbolo del Atlético de Madrid desde 1947 hasta 2017.
«Han sido años de lucha, de muchas incomprensiones, de ataques, de falta de implicación de ciertos colectivos y de algunos empleados del club. No ha sido fácil ni interna, ni externamente. Me ha supuesto incluso desencuentros con amigos y compañeros. Ha sido duro, pero compensa, ha merecido la pena», enumera Eduardo, reflejando el cansancio, pero también una insondable satisfacción.
Él y su Unión Internacional de Peñas, junto a otras agrupaciones como Los 50, llevaban años reclamando al club la creación de un órgano que representara a los aficionados ante la directiva: «Se lo planteamos en muchas ocasiones a Miguel Ángel Gil, en nuestro caso desde 2018. Pero el club nunca lo vio oportuno, ni necesario. Y la realidad es que fue hace un año, tras presentarse esa horrible camiseta (la de las rayas torcidas), cuando tomaron la decisión por el fuerte rechazo social».
Dios escribe derecho con renglones torcidos, decía Santa Teresa de Jesús. Y fue la oposición a esas rayas torcidas la que devolvió a la afición rojiblanca el derecho a opinar 35 años después (desde las últimas elecciones para elegir presidente). «Aquella camiseta fue el detonante, la gota que colmó el vaso. Muchos atléticos consideraban que ya se les estaba faltando al respeto. Y Gil Marín nos convocó a una reunión en el Metropolitano en la que estábamos representados todos los colectivos del Atleti y mostró personalmente su compromiso de crear la comisión y de abordar el tema del escudo», desvela.
Recuperar la voz
Eduardo piensa que Gil Marín nunca estuvo plenamente convencido del cambio de escudo que se ejecutó de forma unilateral en 2017: «Fue una decisión empresarial global. Le dijeron que esto se pasaba en dos días, que éramos cuatro locos, que se olvidaba rápido... Pero no era realista. Y él era consciente. Quería la paz social. Y más vale tarde que nunca».
Pero no era sólo el escudo. El objeto fundacional de la comisión era que se escuchase la voz del aficionado cada vez que el club tuviera que tomar una decisión que afectase a los símbolos y al sentimiento que rodea al Atlético de Madrid. «Recuperar el derecho a voz y voto que nunca debimos perder, pero por mor de la fatídica Ley del Deporte con las SAD perdimos», apostilla Fernández.
Y en el trayecto hubo dudas, incertidumbre sobre si se llegaría a buen puerto, maniobras del club que parecían querer dilatar el procedimiento. Pero la temporada acabó y en la reunión del pasado 22 de junio la comisión aprobó por unanimidad que se realizara una consulta a los socios. El club presentó informes sobre los perjuicios económicos del cambio: «Desde el primer momento dijimos que no íbamos allí a hablar de números, sino de sentimiento. Pero era una cifra absolutamente asumible para un club del presupuesto del Atlético».
La primera consulta desbordó todas las previsiones, más de 61.000 socios a favor del escudo histórico. La segunda votación, la vinculante, todavía las superó: 68.894. «Hemos hecho historia. Hemos marcado un camino, un punto de inflexión, es la primera vez que una SAD accede a dar voz y voto a sus aficionados. Hemos recibido multitud de felicitaciones de otras federaciones de peñas, de aficionados de otros clubes, de instituciones como el CSD, la Federación, la Liga...», revela Fernández.
La batalla ganada es de una enorme magnitud. Una afición derrotando a empresas, al merchandising, a la modernidad. ¿Qué ha supuesto esto para Eduardo Fernández? «Para mí es mucho más importante que ganar un título». ¿Más que una Champions? «Por supuesto. Los sentimientos, los valores, la historia, los símbolos, valen más que cualquier título».