Un inicio inquietante para Simeone

En la temporada en la que maneja el mayor presupuesto desde su fundación (casi 400 millones), en la que el francés Thomas Lemar se ha convertido en el fichaje más caro de su historia (70) y en la que Antoine Griezmann cobra más que cualquier jugador del Real Madrid, el Atlético parece un equipo diferente al que Diego Simeone ha moldeado desde 2012 hasta convertirle en un martillo pilón y en un dolor de muelas para cualquier rival. En el fútbol, ya se sabe, la capacidad económica no es sinónimo de éxito y en el caso de los colchoneros se está demostrando en este inicio de Liga, el peor desde que el argentino se sienta en su banquillo. Los rojiblancos no terminan de coger la onda y en Vigo sumaron su primera derrota , aunque lo peor fue la sensación que transmitió a su gente, especialmente en la segunda parte. Un conjunto alejado de ese espíritu peleón que siempre le ha caracterizado. «En este momento es una buena llamada de atención. El primero para mí», reconoció Simeone después de hincar la rodilla en el duelo ante su amigo Antonio Mohamed .

La derrota en Vigo, es cierto, nació en un inoportuno resbalón de Godín tras el paso por los vestuarios, pero los rojiblancos tuvieron nula capacidad de reacción. Esa desafortunada caída del central uruguayo cambió el rumbo del partido y también supuso el inicio de la extraña descomposición que sufrió el Atlético en Balaídos, el segundo gol llegó cinco minutos después. Un equipo que en la primera parte solo asustó con un disparo de Griezmann que se marchó junto al palo y que en la segunda mitad apenas generó peligro. El dato con el que acabó el choque resulta demoledor para un equipo que cuenta en su delantera con futbolistas con tanta pólvora como Griezmann o Diego Costa . Por primera vez desde 2013, el conjunto de Simeone cerró un partido sin disparos entre los tres palos. La entrada de Lemar y de Kalinic no tuvo el efecto esperado ni aumentó la capacidad de intimidación.

En una temporada en la que se ha gastado 123 millones de euros en fichajes , todos los refuerzos de Simeone comenzaron en el banquillo. Abandonaron de Balaídos siendo testigos del peor arranque del técnico desde que entrena al Atlético. Después de las tres primeras jornadas, suma cuatro puntos, la cifra más baja en sus siete temporadas como entrenador. Los goles son cuestión de rachas, pero hay otro dato inquietante. Solo dos goles en 270 minutos, jamás un ataque del Cholo tuvo tan poca puntería. «El parón de selecciones nos tiene que servir para pensar en nuestros fallos y mejorar», afirmó Saúl tras la decepción en Vigo .

El Atlético ha ido de más a menos en el inicio del curso. Superior al Real Madrid en la Supercopa de Europa, en el estreno de Liga se adelantó en Mestalla , pero acabó pidiendo la hora, una imagen que se repitió en el triunfo por la mínima ante el Rayo Vallecano . El sábado, el Celta terminó pasando por encima a un equipo en el que Simeone tiene trabajo por delante.