Rugby | Seis Naciones
El torneo más antiguo mira hacia las antípodas
Los cuatro equipos fundadores tienen entrenadores titulares procedentes de Oceanía
Pocos podían imaginar en 1883 que el rugby, exponente del clasicismo deportivo británico que ha perdudado durante tres siglos, iba a caer rendido ante el poderío de sus retoños. En ese año se disputaba la primera edición del Cuatro Naciones entre Inglaterra, Escocia, Gales e Irlanda y se sembraba la semilla de lo que iba a convertirse en el torneo más apasionante del invierno. Hoy en día se ha convertido en el Seis Naciones con las adiciones de Francia (en 1903) e Italia (2000) y atrae los focos de los aficionados de todo el mundo.
Un año antes, en 1882 , merced al importante tránstito de información y cultura del Imperio, se había celebrado en Australia el primer enfrentamiento entre Nueva Gales del Sur y Queensland . Y dos décadas después, Nueva Zelanda ya compitió oficialmente contra sus vecinos oceánicos. A lo largo de la pasada centuria la evolución del juego se desarrolló en paralelo en ambos continentes y fue a partir de los años 80 cuando la globalización empezó a establecer una auténtica competencia entre todos.
Con la aparición de la Copa del Mundo y la profesionalización de los equipos y las competiciones, el hemisferio Norte empezó a temer por la supremacía que le otorgaba la historia. Desde 1987 los «All Blacks» han ganado tres campeonatos, mientras que los «Wallabies» y los «Springboks» sudafricanos han logrado otros dos. El solitario título Inglaterra en 2003 y la humillación sufrida en la última edición celebrada en su terreno, donde la final la jugaron Nueva Zelanda y Australia, dejó bien claro el dominio del hemisferio Sur en el rugby actual.
El Seis Naciones también se rinde
Los más recalcitrantes aún argüían que todo eso estaba muy bien, pero que el clasicismo que se vivía en el más antiguo de los torneos, el que se celebra en suelo europeo, valía más que toda esa invasión extranjera. Que el sabor que se vive en los choques del Seis Naciones, con la emoción de los himnos y la pasión en las gradas , no se puede equiparar con el buen juego de los meriodionales.
Sin embargo, hasta los más reticentes han tenido que doblegarse a la realidad y han decidido optar por las líneas de trabajo ganadoras. No deja de sorprender que los cuatro entrenadores titulares de las naciones fundadoras ( Eddie Jones, Joe Schmidt, Warren Garland y Vern Cotter ) vengan de las antípodas. El primero, australiano, guió a Inglaterra al triunfo en 2016 y desde entonces no ha perdido un partido. Los otros tres, neozelandeses, también han tenido buenas carreras en sus equipos de adopción. Schmidt ganó en 2014 y 2016 con Irlanda; Garland también realizó un doblete con Gales en 2012 y 2013 y Cotter conlcuye ahora una etapa en la que le ha inculcado de nuevo el espítu ganador a los escoceses.
Por si esta inmersión de los europeos en el rugby oceánico no fuera evidente con el dato anterior, también la selección de los Lions , compuesta por británicos e irlandeses, que cada cuatro año realiza giras muniales, estará al mando de Warren Garland por segunda vez, lo que le ha obligado a ceder el puesto provisionalmente para este Seis Naciones a su ayudante, Rob Howley.
Los partidos de la primera jornada del Seis Naciones 2017 son:
Sábado 4: Escocia - Irlanda (15:25) e Inglaterra - Francia (17:50).
Domingo 5: Italia - Gales (15:00).