Tokio 2020
Más de 70 ciudades japonesas abandonan el programa para acoger a equipos olímpicos
El temor al coronavirus y las dificultades logísticas frustran una parte del programa de ciudades anfitrionas
Japón atraviesa estos días la cuarta ola de la pandemia de Covid . El país asiático ha vacunado solo al 4.1% de su población, según el rastreador global de Reuters , la tasa más baja entre los países ricos del mundo y solo alrededor de la mitad de su personal médico ha completado sus vacunas. Y en esa situación, el evento deportivo más importante del mundo, los Juegos Olímpicos, se enfrentan a una creciente oposición de la ciudadanía, pues casi el 70% de los encuestados aseguraron ser partidarios de una cancelación o un nuevo aplazamiento.
A solo nueve semanas de la ceremonia de inauguración, la última noticia que llega desde Tokio es que más de 70 localidades del país han abandonado sus planes para acoger a atletas de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos dentro del programa 'host towns' (ciudades anfitrionas).
El objetivo de este programa es que varias ciudades acojan a las delegaciones internacionales antes de los Juegos para que entrenen allí y de paso se aclimaten al país . También estaba previsto que participasen incluso en intercambios culturales con la ciudadanía local, pero estos han sido en su mayoría cancelados por la situación de la pandemia.
Algunos equipos, como el de Vietnam, que tenía previsto alojarse antes de la cita olímpica en la localidad de Kushiro, en Hokkaido, han decidio acudir directamente a la Villa Olímpica «teniendo en cuenta la propagación de las infecciones».
El equipo de natación canadiense se convirtió en la última delegación en retirarse de un campo de entrenamiento preolímpico debido también al temor al coronavirus, mientras que el equipo de atletismo de Estados Unidos canceló su preparación en la prefectura oriental de Chiba la semana pasada.
También las dificultades logísticas derivadas de la pandemia han influido en la decisión de algunas ciudades , como por ejemplo Higashimatsuyama, en la prefectura de Saitama, que renunció a acoger a la delegación cubana porque el coronavirus le impide utilizar las instalaciones universitarias como tenía previsto.
Juegos incluso en estado de emergencia
Pese a todo, los Juegos Olímpicos de Tokio seguirán adelante incluso si la ciudad se encuentra en estado de emergencia , según afirmó este viernes un alto funcionario olímpico, que despejó los temores existentes en Japón sobre la posibilidad de que la cita deportiva pueda representar una carga para un sistema médico que ya está bajo presión por la pandemia.
Preguntado por si los Juegos Olímpicos seguirían adelante incluso si Tokio se encontrase en estado de emergencia, el vicepresidente del COI, John Coates, que supervisa los preparativos, dijo tajante que «absolutamente sí». Y añadió que «todos los planes que tenemos para proteger la seguridad de los atletas y el pueblo de Japón se basan en las peores circunstancias posibles ».
Coates recordó que más del 80% de los residentes de la Villa Olímpica serían vacunados antes del 23 de julio, cuando comienzan los Juegos Olímpicos, y confirmó que espera que la aceptación pública aumente a medida que más personas se vacunen. «Pero si no es así, entonces nuestra posición es que debemos asegurarnos de continuar con nuestro trabajo. Y nuestro trabajo es garantizar que los Juegos sean seguros para todos los participantes y para toda la gente de Japón», agregó.
Para minimizar el riesgo de infecciones, los organizadores han reducido el número de personas que participarán en la cita olímpica como parte de las delegaciones extranjeras , de alrededor de 180.000 a 78.000, desgranó a los periodistas Seiko Hashimoto, quien dirige el comité organizador.
Explicó además que los Juegos Olímpicos contarán con 230 médicos y 300 enfermeras por día, se realizarán entre 50.000 y 60.000 pruebas de coronavirus a diario y que los organizadores han asegurado alrededor del 80% del personal médico que necesitan. « Queremos asegurar al personal médico de una manera que no suponga una carga para los servicios médicos locales », explicó Hashimoto.