Polideportivo
El CAR de Sierra Nevada cuelga el cartel de completo
El recinto granadino es el epicentro del entrenamiento de cientos de deportistas de todo el mundo
Cada día, a las doce la noche, se cierra el wifi gratuito en el Centro de Alto Rendimiento (CAR) de Sierra Nevada. Se apagan las luces y no solo se cancela la línea de internet. La hora es una señal de recogimiento grupal, de toque de queda para los 190 deportistas que pernoctan, entrenan y sueñan en las instalaciones mejor dotadas de Europa. En tiempos de pandemia, de movilidad escasa y amplias restricciones, la estación invernal granadina registra plena ocupación. Es propietaria de algo que no tiene nadie: 2.320 metros de altitud. El escenario ideal para el entrenamiento de los atletas, el acopio de glóbulos rojos y el refuerzo de la resistencia en deportes de fondo.
Al CAR de Sierra Nevada acuden deportistas de medio mundo atraídos por la bondad del emplazamiento. Más de veinte instalaciones que incluyen módulos de atletismo, de saltos, pabellón de parquet flotante, piscina olímpica cubierta de seis calles, campo de césped, pista de atletismo o salas de musculación. El entorno ofrece circuitos exteriores para senderismo, rutas de bici de montaña, carreteras para bici de competición o nieve para el esquí o las pruebas de fondo.
Estos días el recinto propiedad del Consejo Superior de Deportes (CSD) se encuentra al cien por cien de rendimiento, con algunos protagonistas de primer nivel mundial. Los atletas Jakob y Henrik Ingebrigtsen, el ciclista belga Remco Evenepoel o los corredores del Movistar que van a participar en el próximo Giro de Italia. Las condiciones económicas son una bicoca: 90 euros por día y persona para los extranjeros con alojamiento, uso de las instalaciones y tres comidas diarias; y 60 euros para los deportistas españoles.
Alto nivel
«El perfil de los deportistas que nos visitan es de alto nivel –explica a ABC José Espejo, preparador físico y responsable de marketing del CAR–. No son aficionados que buscan un salto de calidad, sino profesionales de primera línea. Nuestro cliente estrella es la natación por las condiciones de la piscina olímpica. Vienen no solo de España, tenemos gente de Sudamérica, Catar o Lituania. Hay mucho deportista de ciclismo, atletismo, remo, triatlón. También baloncesto o balonmano. El fútbol no viene. Acude algún futbolista a título individual con su preparador personal, pero nada más».
Los beneficios del entrenamiento en altitud son incuestionables para la comunidad científica y médica. Es de común aceptación que trasladarse a entrenar a una zona de altitud en un contexto de baja concentración de oxígeno (hipoxia) implica rendir mucho mejor al regresar a cotas normales de altitud, sobre todo en aquellos deportes en los que el fondo cobra mayor relevancia. La clave del entrenamiento en altura consiste en aumentar la resistencia del cuerpo humano acostumbrándolo a un entorno con poco oxígeno. El organismo reacciona produciendo más glóbulos rojos , más transporte de oxígeno al músculo y así aumenta la resistencia del deportista cuando regresa a nivel del mar.
«El beneficio de la altitud se va apreciando en la evolución del hematocrito –comenta José Espejo–. Lo más efectivo es una concentración de tres a cuatro semanas . En los nadadores, de cinco a seis semanas. También varía en función del momento de la temporada».
Un rival francés
Sierra Nevada tiene un rival en Europa. Es el campamento de Font Romeu, la estación invernal francesa de los Pirineos, que sí acoge normalmente a la selección nacional francesa. Se encuentra a 1.650 metros, algo menos de la franja que los especialistas recomiendan como clave para rentabilizar el consumo de oxígeno, 1.800 metros. Sierra Nevada se eleva hasta los 2.320 metros para dormir cada noche, aunque en el caso de los ciclistas asciende todavía más hasta la zona de Hoya de la Mora, donde se han ubicado algunas llegadas en meta de la Vuelta a España.
Al margen de los servicios convencionales, el Centro de Alto Rendimiento ofrece numerosos complementos extra , casi todos enfocados a la natación y al atletismo: control de la fuerza, evaluación de las capacidades coordinativas mediante vídeo y células fotoeléctricas, valoración de velocidad mediante células fotoeléctricas 1/1000s, entrenamiento específico de salidas y virajes con cronometraje electrónico, informes videográficos, visualización de la técnica durante las sesiones, análisis cinemáticos y cualitativos de la técnica, análisis cinético de salidas y virajes con plataforma de fuerza, monitorización del entrenamiento...
«En el CAR se habla más inglés que español », indica Espejo. Durante la pretemporada de natación y en puertas de los Juegos Olímpicos, han coincidido en la montaña granadina seis medallistas olímpicos que han buscado en Andalucía un lugar donde establecer su residencia invernal. Ningún otro CAR en España (la Blume en Madrid, Sant Cugat y León) aporta el beneficio del entrenamiento en altitud que se puede combinar con ciclos a media altura o a nivel del mar en las cercanas Granada o Motril.
«Aquí no hay posibilidad de ocio, sino entrenamiento y comportamiento profesional –cuenta Espejo–. Si un deportista no cumple con los horarios, se le invita amablemente a abandonar el CAR ».