Dopaje
El preparador de Mo Farah probaba el dopaje con sus hijos
Sancionado por cuatro años, Alberto Salazar mantenía contacto con Lance Armstrong
La Agencia Antidopaje de Estados Unidos (USADA) y su director Travis Tygart han provocado una nueva detonación en el deporte mundial, al estilo de la convulsión del dopaje encubierto de Lance Armstrong que salió a la luz gracias al testimonio de los arrepentidos, una investigación concienzuda y una cadena de revelaciones de deportistas implicados. El núcleo de su objetivo esta vez fue el preparador estadounidense de origen cubano Alberto Salazar, entrenador de una leyenda como el británico Mo Farah, seis veces campeón mundial y propietario de cuatro oros olímpicos en 5.000 y 10.000 metros, y de varios de los atletas más destacados que están compitiendo en el Mundial de Doha ( Sifan Hassan, oro en los 10.000 femeninos , Clayton Murphy y Donovan Brazier). Salazar ha sido suspendido por cuatro años.
La USADA acusa a Salazar de traficar con testosterona, inyectar el aminoácido L-carnitina a sus atletas y obstruir la recopilación de información sobre su conducta. Salazar, de 61 años, es el mentor del Proyecto Oregon, un grupo de capacitación de talento con sede en el noroeste de Estados Unidos financiado por Nike, que ha tenido éxito en la media y larga distancia.
La USADA asegura en su comunicado haber reunido muchas pruebas, testigos oculares, testimonios, correos electrónicos y boletines médicos. Según Tygart y su equipo de trabajo, habría más de 2.000 evidencias para inculpar a Salazar, y que los procedimientos incluyen 5.800 páginas de transcripciones. La BBC informó que la maratoniana Kara Goucher y el exentrenador Steve Magness figuran entre los testigos que aportaron evidencias sobre el caso.
«Los atletas encontraron el coraje para hablar y exponer finalmente la verdad», dijo Travis Tygart. «Mientras trabajaban en el Nike Oregon Project, el señor Salazar y el doctor Jeffrey Brown (un endocrino también implicado y suspendido) demostraron que para ellos ganar era más importante que la salud y el bienestar de los atletas a quienes juraron proteger».
Entre los correos electrónicos la USADA incluye uno que envió Salazar a Lance Armstrong antes de que se desatase el vendaval antidopaje que acabó con el ciclista ahora innombrable que ganó siete Tours consecutivos entre 1999 y 2005.
En diciembre de 2011, Salazar considera haber afinado la dosis de L-carnitina necesaria para que no dé positivo en los controles y se lo hace saber a Lance Armstrong, quien se acababa de retirar por segunda vez del ciclismo profesional, enfocaba su vida deportiva hacia el triatlón y ya estaba siendo investigado por la USADA.
Correo a Lance Armstrong
«Lance, llámame lo antes posible! Lo hemos probado y es increíble (...) 100% legal y natural. Vas a ganar alrededor de 16 minutos cuando corras el Iron Man si tomas esta vitamina».
Según el informe de la agencia americana, Salazar habría utilizado a sus hijos Alex y Tony como conejillos de indias para experimentar con un gel de testosterona (AndroGel), toda vez que uno de sus atletas (Galen Rupp, doble medallista olímpico) se había asustado. Salazar quería saber la cantidad de gel que se puede aplicar sin dar positivo y decide probar con sus dos hijos.
Tony acepta la propuesta, pero se inquieta porque su esposa y él están tratando de concebir un hijo. « Ten cuidado con el AndroGel», le advierte el doctor Brown, quien le aconseja lavar la zona de aplicación en el cuerpo para no tomar riesgos para su salud.
Mo Farah, que fue nombrado sir por la Reina Isabel II , nunca ha dado positivo en un control antidopaje y ayer comunicó que abandonó el Proyecto Oregón en 2017, tratando así de desvincularse de su entrenador de toda la vida.