Boxeo
Noche de riesgo para Canelo Álvarez
El mexicano regresa al ring un año después ante Callum Smith por los cinturones WBA y WBC del peso supermedio
Ha pasado un año desde el último combate de Saúl 'Canelo' Álvarez , que a día de hoy sigue siendo considerado de forma mayoritaria el mejor boxeador del mundo «libra por libra». El mexicano no pasaba tanto tiempo sin subir al ring desde su doble enfrentamiento con Gennadiy Golovkin, por lo que hay hambre por verle pelear. Vuelve, además, ante un rival de enjundia, un Callum Smith que llega invicto después de 27 combates y como titular de la corona mundial del peso supermedio, versión WBA. Ese cinturón será el que se ponga en juego este sábado (DAZN, 2.00h) en el Alamodome de San Antonio, Texas, junto con el versión WBC, vacante desde el pasado mes de agosto después de que Kevin Benavidez no diera el peso en su victoria ante Alexis Angulo.
Canelo, que permanece como supercampeón WBA del peso medio, subió en 2019 hasta la categoría semipesado para derrotar a Sergei Kovalev y presumir de títulos en cuatro pesos diferentes.
A Canelo se le valoró mucho el esfuerzo de ascender otra categoría. Pero no tanto el rival elegido, más lento y veterano que algunas pciones más atractivas que había en cartera. El mexicano ha escuchado las críticas y a sus fans y asume un reto más importante para su regreso.
Así, baja de nuevo de peso para seguir haciendo historia. «Lo que genere riesgo es lo que me gusta, esta pelea es un gran riesgo para mi carrera, pero también una oportunidad para hacer historia; Callum es el número uno de las 168 libras y quiero hacer campaña en ese peso», dijo el mexicano en la previa del combate.
Álvarez , 53-1-2 en su palmarés, se ha entrenado con el peso pesado cubano Frank Sánchez y eso le ha permitido prepararse para detener a un contrario más corpulento y de brazos largos; el púgil originario de Guadalajara tratará de ser paciente para romper la guardia del europeo y con embestidas desde la media y la corta distancia buscar los mejores impactos.
Smith , británico de 30 años, tendrá su mayor ventaja en su tamaño (1'91 frente al 1'73 de Canelo). Tampoco le falta técnica y pegada, y además está ante la pelea de su vida. «Entiendo que el Canelo es favorito. Eso me da satisfacción porque he trabajado fuerte para estar donde estoy; debo tener una táctica establecida, observar qué sucede en la pelea. Nunca rehuyo el combate y creo poder ganar a cualquiera».