Ciclismo
Conmoción por el primer caso de «dopaje mecánico» en el ciclismo
La UCI «caza» un motor en la bicicleta de la belga Van den Driessche durante la disputa del Mundial Sub’23 femenino de Ciclocross
La Unión Ciclista Internacional (UCI) anunció este sábado que la bicicleta de la belga Femke Van den Driessche fue apartada del Mundial Sub’23 femenino de Ciclocross, que se disputa en Zolder (Bélgica), al detectarse irregularidades y sospechar que podría llevar incorporado un motor. Poco después, la federación belga de ciclismo (RLVB) confirmó el primer caso de «dopaje mecánico» en el ciclismo.
«La Unión Ciclista Internacional confirma que de conformidad con el Reglamento sobre fraude tecnológico, una bicicleta de la prueba Sub-23 femenina ha sido apartada para su posterior investigación(…). Esto no afecta a ninguna de las corredoras del podio», explicó la UCI en un comunicado.
La Federación belga confirmó más tarde que la bici de Van den Driessche, que ha sido campeona de Europa de Ciclocros, llevaba incorporado un pequeño motor. Previsiblemente, la UCI apartará a la belga como mínimo seis meses de la competición y la impondrá una multa de entre 18.000-180.500 euros.
Esta, sin embargo, no es la primera ocasión que la UCI investiga la presencia de motores en bicicletas, una ayuda que hasta este sábado no había podido demostrar. El suizo Fabian Cancellara , Tour de Flandes de 2010, o el canadiense Ryder Hesjedal , en la La Vuelta 2014, fueron algunos de los ciclistas investigados por presunto fraude tecnológico.