Rugby
Gales da el primer aviso en el Seis Naciones
El XV del Dragón arrasa a Escocia (34-7) mientras que Irlanda gana con apuros en Francia (13-15)
El mejor torneo de rugby del mundo comenzó con dos partidos muy diferentes, que mostraron dos formas muy distintas de ganar. Por un lado, Gales sacó toda la frustración que tenía por sus múltiples bajas para arrollar (34-7) a una Escocia que tiró por la borda todo lo conseguido en los últimos meses; por otro, Irlanda hizo bueno su papel de favorito para imponerse en París , aunque con más sudores de los previstos (13-15).
El pitido inaugural del Seis Naciones 2018 se dio en Cardiff donde, en principio, podía pasar cualquier cosa. Se enfrentaban un equipo local castigado por las lesiones y uno visitante muy crecido por sus últimos reultados. Pero la duda duró solo seis minutos. En cuanto Gareth Davis aprovechó un contragolpe para lograr el primer ensayo se acabó la pólvora caledonia. La conversión posterior de Leigh Halfpenny dio paso a 22 puntos consecutivos anotados por el zaguero (con dos ensayos incluidos), que desarbolaron por completo a sus rivales.
Gales no se creía lo que estaba pasando. A pesar de estar mermados, sentían el calor de la grada y jugaban de una manera alegre y dinámica, tratando de alcanzar siempre la línea de marca. El marcador del descanso (14-0) se fue incrementando de una manera implacable hasta que, a falta de siete minutos para terminar, lucía un sonrojante (34-0). Los del XV del Cardo no sabían dónde meterse, pero tiraron de coraje y no se dejaron llevar por el desánimo.
Exhibiendo una gran deportividad hicieron un último esfuerzo para anotar y convertir por medio de Pete Horne y Finn Russell y limar un poco la diferencia (34-7) . Con este resultado, Gales se pone en cabeza del torneo con sultura, mientras que Escocia deberá luchar por evitar la cuchara de manera.
Irlanda sufre más de la cuenta
En París, por contra, se vio un duelo muy distinto. Durante 71 minutos fue el equipo local, Francia, quien sufrió sin conseguir sacar una sonrisa de la boca de sus abnegados seguidores. Los irlandeses, que llegaban como claros favoritos, se pasaron el partido contemporizando con un cierto aire de superioridad hasta que vieron cómo en una acción genial de Teddy Thomas se les venía el mundo encima.
Hasta ese momento, el plan de acción de los verdes había salido a la perfección: se mantenían en campo contrario gracias al poderío de sus delanteros y anotaban tantos golpes de castigo como se les ponían a tiro. Así fue desde el minuto dos, cuando Johnny Sexton se apuntó el primero de los tres que conseguiría en la primera mitad. Los galos, sorprendidos por la estrategia contraria, no pudieron imitarles hasta el 35, cuando Maxime Machenaud logró sus primeros puntos.
La tranquilidad de los insulares al descanso (3-9) se convirtió en parsimonia cuando su líder aumentó la distancia (3-12) y nada parecía alterarles. Pero «les bleus» empezaron a sacar ese carisma que les ha imprimido el nuevo entrenador Jacques Brunel y no cejaron en la reconquista. Pese a tener menos poderío físico que sus oponentes, consiguieron sacar un golpe de castigo a su favor que convirtió Machenaud (6-12). Luego, un mágico ensayo de Thomas y la transformación posterior de Anthony Belleau les dio una insperada ventaja (13-12) a falta de siete minutos .
Pero en los últimos instantes, Irlanda tiró de galones. Se aprovechó de que Belleau erró un tiro a palos y siguió porfiando hasta que, con el tiempo cumplido, el gran Sexton consiguió un drop salvador que dio la vuelta a la tortilla (13-15) . Al final, los del trébol se llevaron los cuatro puntos, pero con más sufrimiento del previsto y Francia dio muestras de estar en el buen camino.