Fútbol sala
El Jaén Paraíso Interior se planta contra un calendario «inviable»
El club andaluz se ve obligado a jugar 9 partidos en solo 21 días para recuperar los encuentros aplazados por Covid-19
En condiciones normales, el 17 de enero deberían haberse conocido los ocho equipos que disputarán la Copa de España de fútbol sala , uno de los momentos más esperados del calendario, la cita donde, los que saben, dicen que se ve el verdadero espíritu de este deporte. Pero si un año se ha alejado completamente de todo lo considerado normal ese ha sido este 2020 de la pandemia de coronavirus . Un azote que, en el caso del futsal, se ha unido a una compleja situación derivada de la ruptura del convenio entre la Liga Nacional de Fútbol Sala (LNFS) y la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y la toma del control de la competición de élite por parte del ente federativo. Así, superada ya la primera vuelta liguera y con ella el corte para disputar el torneo copero, los múltiples partidos aplazados por el Covid-19 rodean de incertidumbre la que había venido a llamarse «fiesta del fútbol sala» y que este año se disputará en el madrileño WiZink Center en marzo.
Las dificultades provocadas por el virus en sí y las medidas para tratar de contenerlo son grandes. Mediada la primera vuelta de la liga eran ya 14 los partidos aplazados en Primera (y 16 en Segunda). La competición ha ido arrastrando cierto carácter virtual al avanzar cada equipo a un ritmo diferente en función de los casos positivos con los que se ha topado , tanto en su propia plantilla como en la de los rivales. Así, cuando la liga ha visto ya su jornada 18, algunos equipos han jugado solo 14 partidos, y el Jaén Paraíso Interior, el más afectado por los aplazamientos, 13.
El incierto calendario provoca inquietud en un buen número de clubes que tienen como uno de los objetivos de la temporada estar en la Copa de España y que, como explica la LNFS, no tienen claro que se puedan recuperar los partidos aplazados en unas condiciones aceptables, y por tanto tampoco los criterios con los que se permitirá el acceso a la cita.
Recientemente estos fueron aclarados por fin por la RFEF, que trasladó a los clubes la fórmula con la que se elegirán los participantes en la cita copera. Unos criterios que, en caso necesario llegarán al uso de coeficientes, pero que en Las Rozas pretenden evitar jugando todos los partidos posibles antes de finales de febrero .
Sin embargo, el plan no ha gustado a todos, sobre todo a los que deben hacer un verdadero maratón de partidos para ponerse al día, como es el caso del Jaén . El club andaluz emitió este domingo un comunicado en el que calificó de «inviable» la decisión del Juez de Competición que aboca al equipo a jugar «9 encuentros en 21 días» y que considera que atenta «directamente contra la salud» de los jugadores, por lo que estudia recurrir al Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) para pedir la suspensión cautelar.
🚨 Comunicado oficial: Calendario de febrero
— Jaén Paraíso Interior FS (@JaenFS) January 31, 2021
⚽️ Desde el Club expresamos nuestro total y absoluto rechazo a la medida tomada el pasado jueves por el Juez de Competición#SomosJaén💛
«El Club Jaén Paraíso Interior Fútbol Sala expresa su total y absoluto rechazo a la medida tomada el pasado jueves por el Juez de Competición en la que se obliga a nuestro equipo a disputar varios partidos aplazados en los próximos días de tal forma que deberíamos jugar 9 encuentros en 21 días, 7 de ellos fuera de casa, lo que resulta un hecho desproporcionado que atenta directamente contra la salud de nuestros jugadores », señala el comunicado.
«Nos vemos motivados a tomar esta decisión tras haber realizado diferentes propuestas a la RFEF y al propio Juez de Competición, en las que presentábamos la posibilidad de disputar los mismos encuentros de una forma mucho menos gravosa y arriesgada, solventando igualmente el problema de la acumulación de partidos aplazados que sucede debido a la influencia de la enfermedad Covid-19», explica el club jienense.
Además de considerar que la fórmula de la RFEF es «inviable» y «pone en riesgo la salud» de la plantilla, supone «una gran complicación logística casi imposible de acometer debido a la complejidad del calendario y la cantidad de viajes » en la actual situación de pandemia.
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