Balonmano
Cristina Fernández Piñeiro: «Me destituyen por denunciar»
La árbitra Fernández Piñeiro dice haber sido despedida por un conflicto machista con la Federación
Cristina Fernández Piñeiro derribó puertas a golpe de silbato. Jugadora de balonmano en su infancia, desde los 17 años quiso ser árbitra. A pesar de todas las trabas que suponía entrar en un mundo donde las mujeres no habían estado antes. Encontró apoyos en algunos compañeros, y también gradas que le gritaban que se dedicara a otras cosas. Pero siguió. Entre otras conquistas, fue la primera árbitra en pitar en Asobal , en dirigir en Mundiales y Europeos y hasta una final de la Champions masculina . Tras dejar el silbato, siguió peleando por las mujeres en el Comité Técnico de Árbitros.
Un Comité que decidió prescindir de ella el pasado diciembre. La causa: «Me han cesado por denunciar un comportamiento total y absolutamente machista en la persona de un delegado federativo», resume para ABC. «Denuncio unos hechos cometidos hacia unas árbitras. Frases como estas: “No penséis que estás aquí por ser buenas árbitras, estás aquí porque sois mujeres y a alguien le ha salido del coño designaros para estar aquí”. “A ver si os preñan pronto porque para esto no valéis” . Yo traslado estos hechos telefónicamente al presidente del Comité Técnico de Árbitros. Pero pasan los meses y no veo que hagan nada. Cuando veo que esta persona sigue en las listas, les digo que no lo voy a consentir. Y envío la denuncia al presidente de la Federación Española», continúa la árbitra.
A partir de ahí se inicia una investigación del Comité de Competición, entidad independiente, que recoge información preguntando a las partes. La resolución del expediente es un año de inhabilitación para el delegado. «Y como consecuencia, mi cese el 20 de diciembre . No me vuelven a designar a ningún partido en competiciones nacionales. Es un cese que acepta el presidente de la Española, pero que lo propone el presidente del Comité de Árbitros. No contento con eso, hace público que mi cese se basa en “pérdida de confianza” », señala.
Reitera que, como ha hecho siempre en la pista, seguirá defendiendo que la mujer esté en los lugares que merezca. «Tengo la conciencia muy tranquila porque no estaba equivocada: los hechos se sancionaron. Y por denunciar un acto machista me retiran y me suplen de inmediato. Ellos tienen el poder, y es complicado, pero yo voy a pelear, y si tengo que denunciar otra vez, lo haré».
El presidente del Comité Técnico de Árbitros accede a hablar con ABC y a citar su nombre: Pablo Permuy . «No tengo nada que ocultar. Porque no es cierto que se cese del grupo de trabajo del Comité a Fernández Piñeiro por la denuncia, sino por actuar a espaldas de los miembros de su grupo de trabajo y del comité de árbitros». Y explica su visión: «Una de las árbitras implicadas, que se han desvinculado de la denuncia, me cuenta lo que ha ocurrido, que el delegado ‘se ha pasado mil pueblos’. Ante estos hechos que considero muy serios, les digo que denuncien por escrito. No se puede abrir una investigación por un algo que me dice uno contra otro. Pero no hay denuncia», sigue.
«Cristina ve a este delegado en una reunión y dice que no está de acuerdo en que siga. Pero en ningún momento dice a nadie lo que va a hacer. El lunes siguiente me indican que ha llegado un burofax con la denuncia. La leo y los comentarios son serios, muy fuera de tono, impropios y son merecedores de sanción. Y la hay, tras una investigación ajena al Comité, la Federación y a ella porque solo se pregunta a los implicados. Por eso -reitera- es muy claro que no tiene nada que ver con la denuncia por machismo. Hay hechos. Un castigo . Es más, se aplaza la decisión del cese para que no influyera a ningún lado. Y yo no puedo trabajar con una persona que obra unilateralmente a espaldas de los demás. Es un puesto de confianza y fue desleal a un grupo de trabajo».
Noticias relacionadas