Europeo de balonmano
España afina el engranaje en defensa y se acerca a las medallas
Crónica
Ya sin las bajas por coronavirus, Cañellas y Tarrafeta en el conjunto español, y varios jugadores en el equipo alemán, se presagiaba un partido duro y reñido. Han sido así todos, quizá con la excepción del mundial de 2018. Por eso no es extraño que el marcador siempre estuviera tan ajustado que cada jugada inclinaba la balanza hacia un lado. Sin embargo, España ya afina el engranaje, cuando empieza de verdad el camino a las medallas. Son 16 victorias consecutivas en campeonatos europeos. Y a seguir.
Los de Jordi Ribera ofrecieron el papel que se necesitaba: fortaleza en la defensa, aplacar los ímpetus alemanes, agazapados en los últimos minutos sobre todo, frenados los ataques rivales durante más de seis minutos . Como dato, importantísimo en balonmano, España solo ha tenido una pérdida de balón en toda la primera parte. Un bloque total.
Se adaptaba el conjunto español a ese cuerpo a cuerpo del que salió bien parado para cerrar la portería. Destacada la labor de Casado y Antonio García atrás. Se generó buena sintonía con los pivotes, estupendo Adriá Figueras. Solo faltaba ajustar mejor las ideas al ataque.
Y se consiguió en la segunda parte. Un arreón de los buenos permitió a los españoles seguir con el muro de contención levantado y abrir grietas en el teutón . Desatados Maqueda y Solé. Cinco goles de parcial y España se venía arriba. Todo lo que salía bloqueado en la primera mitad, entró tras los vestuarios. Todo lo que el marcador viajaba de parejo en los primeros 30 minutos, se destapó en los segundos. Cinco, seis, siete goles de distancia. Quince minutos Alemania sin anotar. España, la mejor, la de la defensa y la carrera, se afina en el camino hacia las medallas.