Entre barreras | Morante: «Me siento dolorido del hombro y la clavícula»

Llegaba Morante de la Puebla visiblemente mermado tras la cogida del día anterior en La Línea de la Concepción. La infiltración le permitía torear, pero el dolor seguía presente. Estoqueado el primer toro, el maestro de la ribera del Guadalquivir explicaba ante los micrófonos del Canal Toros cómo se encontraba de la lesión: «Me siento un poco dolorido del hombro y de la clavícula . Me infiltré ayer y esta mañana». Morante explicó que ese primer oponente había evidenciado tener problemas de vista en los compases iniciales: «No era un toro fácil porque venía con mucha fuerza. Con el capote no le pude coger bien el aire , pero ha sido una faena con momentos emocionantes».

Tras concluir con el cuarto (bis) explicó que «éste lo ha puesto mucho más difícil: echaba la cara alta y ofrecía pocas oportunidades para el lucimiento, pero hay que lidiar lo que sale por toriles. Hoy es un día especial en Sevilla y ha hecho una tarde muy bonita de toros. Sevilla inspira sólo con el hecho de estar aquí , y con el sueño de hacer algo grande».

Por su parte, Juan Ortega se mostró agradecido por los «quince momentos» que tuvo su primer oponente, al que cuajó con el capote, tanto a la verónica como por chicuelinas. «Un día estos momentos surgen con el capote y otro día llegan con la muleta». Tras estoquear al quinto de la corrida se mostró contrariado porque «es difícil cuando los toros embisten a trancas y barrancas. Es difícil reunirte con ellos y conseguir que diga algo».

Pablo Aguado también se mostró decepcionado con el escaso juego que ofreció su lote de Juan Pedro Domecq, aunque sí reconoció haber sentido esos momentos de especial conexión con el capote, en el duelo a la verónica con Morante y por chicuelinas con Juan Ortega.