Toreo de salón... en el salón de casa
Los alumnos de la Escuela de Badajoz continúa sus entrenamientos en su domicilio
Cuando la pasión por un arte o por una afición recorre y traza la vida de una persona, cualquier espacio o momento es bueno para practicar. En estos días de confinamiento, los alumnos de la Escuela de Tauromaquia de Badajoz retiran la mesa y las sillas del salón de sus casas para hacer eso, toreo de salón.
La imposibilidad de acudir a la escuela de tauromaquia que dirige la Diputación Provincial y mucho menos a tentaderos, las alumnas y alumnos practican en su casa. Con sus capotes y muleta».
A Yeray Góme z, de 20 años de edad, le fastidia de estar encerrado en casa, no poder participar en tentaderos, pero considera que lo importante es no dejar de entrenar.
Tanto él como el resto de compañeros de escuela dedican algo de tiempo a la preparación física -Yeray sube y baja las escaleras de su casa- y a la técnica. «Unos 30 minutos con el capote y otros tantos con la muleta», ha afirmado Yeray a Efe
Su compañera de escuela, Alba de los Reyes , una malagueña de 18 años, hace cinta de correr por la mañana y después practica entre una hora y hora media con el toreo de salón. Por la tarde, más ejercicio físico y un poco «más de toreo en el salón» de su casa.
Tanto Yeray como Alba añoran tener al lado a sus a sus «maestros», como Luis Reina y Luis Manuel Reinosa , para que les corrijan en ese momento. Además, ambos buscan vídeos por internet de sus toreros favoritos. «Veo a Talavante, mi preferido, para aplicar sus movimientos y perfeccionar mi técnica», añade Yeray.
«Entrenamos muy duro, aunque no es lo mismo en casa, para que cuando se vuelva a la normalidad nos coja preparados», coinciden en afirmar ambos. Alba, a veces, se graba en el salón de su casa y envía los vídeos a sus profesores para que estos le den consejos.
Además, y a través de las vías telemáticas , el centro formativo les cuenta la historia de la escuela, les muestra fotos de antiguos alumnos, actividades y anécdotas a modo de juego, cuya recompensa es la participación en los festejos que se puedan celebrar este año.
Fran Amaya , de 19 años, otro de estos jóvenes alumnos, reconoce que entrena donde y como puede, desde el salón al balcón, y ve corridas de toros por canales televisivos.
En declaraciones a Efe, el gerente de la escuela taurina, Pedro Ledesma , ha explicado que en la actualidad cuentan con 42 alumnos de entre 10 y 21 años, entre ellos cinco chicas, de Cáceres, Arroyo de la Luz, Sierra de Fuentes, Sevilla, Málaga, Portugal y México, además de Badajoz, tanto ciudad como provincia.
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