San Isidro, en directo: toros de Garcigrande para El Juli, Talavante y Rufo

La corrida número trece de San Isidro no ha podido tener mejor final para un joven torero, el toledano Tomás Rufo, que ha abierto la Puerta Grande tras cortar una oreja a cada uno de su lote.

Buena la corrida de Garcigrande con cuatro destacados toros, y una gran faena de El Juli, que malogró con la espada. Tampoco acertó con los aceros Alejandro Talavante en una tarde con luces y sombras para el extremeño.

Puerta Grande para Tomás Rufo

Ya en la arena Coloristo, de 557 kilos y cinco años cumplidos que desarma a Tomás Rufo en el primer contacto con el capote. Bien Fernando Sánchez con los palos y buen inicio de faena del novel.

A partir de ahí falta la chispa que haga tirar de la faena hacia arriba. La busca Rufo con la muleta en la derecha en una serie muy redonda y ajustada. Lo esperan, y al natural surgen momentos buenos, pero con intermitencias. Se tira a matar o a morir y cobra una estocada entera. Piden la oreja con fuerza, concedida, lo que supone abrir la Puerta Grande en el día de su confirmación de alternativa.
A hombros se lo llevan…

El quinto, Clarinete, de 544 kilos, bien armado. Talavante no quiere irse de vacío y se va decidido a brindar el toro a la concurrencia. De rodillas en el tercio, una primera serie de la que sale trompicado, y otra llevándolo muy templado y obligándole a tomar la muleta muy por bajo.

A derechas, sin dejarse tocar la muleta por los derrotes que lanzaba el de Garcigrande. Con la izquierda, su mano fetiche, torea muy templado y largo. Se espera con un silencio de expectación lo que puede venir. Llega otra serie al natural sin la misma intensidad, y cuando parecía que aquello no rompía, unos naturales mirando al tendido, pasándoselo muy cerca y un valeroso desplante lo ponen otra vez en el camino del éxito. Pero el pinchazo, la estocada baja, y la nada. Le quedan dos tardes en la Feria, otro volver a empezar.

El Juli, sin espada, roza la gloria

El cuarto, Hospiciano, de 618 kilos, es para El Juli que lo saluda toreando por verónicas de manos bajas, que aprueba la cátedra. Derriba al picador en el primer encuentro y luego se desentiende mucho.

Lo fija en la muleta y el toro la sigue con celo. Firme el madrileño que lo lleva largo en una intensa serie con la mano derecha. Cita al natural y al toro le cuesta más repetir. y de nuevo por el derecho, con más empuje, más poder, la faena rompe.
Naturales de uno en uno, largos, plenos de poder, y obligados de pecho que ponen el público en pie. Faena a más siempre. Aún quedaba el broche a izquierdas con mando supremo. Lo tenía todo en la mano. Pinchazo y estocada, que frenan lo que ya se vislumbraba como un triunfo de Puerta Grande. Hay petición de oreja que el presidente decide no conceder. Y vuelta al ruedo de reconocimiento a una faena en la que rozó la gloria.

Esgrimisto, de 552 kilos, el tercero, el único cuatreño de la corrida de Garcigrande, que no hizo las cosas muy claras en los dos primeros tercios. Se dobla Talavante con la muleta y el toro responde, pero no siempre lo hace durante la faena. No convence al graderío por el derecho, y también le afean la colocación al natural. La cosa, lejos de mejorar, se estanca, y para rematar la obra, una estocada muy fea.

El segundo es Visitante, de 599 kilos. Se mueve en los primeros tercios y no parece sobrado de fuerza. Se lo saca a los medios y allí pierde las manos ante la muleta de El Juli. Se desencadenan las protestas y no hay nada que hacer, y menos con las espada con al que falla repetidamente antes de cobrar una estocada.

Oreja a Tomás Rufo en el de la alternativa

El toro con el que Tomás Rufo confirma la alternativa es Cascabel, un colorado ojo de perdiz de 554 kilos, con la divisa de Garcigrande, y la seriedad de un cinqueño. Pone orden Rufo con un suave quite a la verónica tras un embarullado tercio de varas.

Tiempo para la ceremonia. Palabras sentidas de El Juli y los consiguientes abrazos de padrino y testigo. Brindis a cielo y sin pensárselo dos veces lo prueba y cita largo con la muleta en la mano derecha. Un buen toro y despaciosa la primera serie de mano baja. Largos los naturales, y de nuevo a derechas la faena despega. Le puede con la zurda y por bajo, y las ganas de triunfo le pueden, insiste y baja la intensidad del trasteo. El toro no le pone las cosas fáciles para la suerte suprema y cobra una estocada. Y pasea feliz la primera oreja de la tarde.

Murmullo de expectación en los tendidos ya llenos, y gestos de responsabilidad en el patio de cuadrillas, en donde los tres matadores y sus cuadrillas se lían los capotes de paseo. Aparece el pañuelo blanco sobre el palco de la presidencia. Clarines y timbales, alguacilillos ya en el ruedo, y El Juli y Talavante, arropando al novel Tomás Rufo, en el centro de los dos, ya pisan la arena de Las Ventas.

El Juli, Talavante y Rufo, ya en la plaza

Los tres toreros han llegado a la plaza con mucho tiempo, media hora antes de comenzar el paseíllo, la terna ya estaba en el patio de cuadrillas. El Juli, de azul y oro, Talavante, de Nazareno y oro, y Tomás Rufo, de blanco y oro, velan armas, mientras los tendidos van poblándose de aficionados.

Cartel de “No hay billetes”

Buenas tardes ante la celebración de la corrida número trece de esta feria de San Isidro. Cartel de “No hay billetes” y máxima expectación por uno de los carteles de más tirón de todo el ciclo.

Los toros pertenecen a la ganadería de Garcigrande, una de las más demandadas por las figuras del toreo, y ante ellos El Juli, Alejandro Talavante y la confirmación de alternativa de Tomas Rufo.
El Juli vuelve a Las Ventas tras la gran tarde que cuajó con toros de La Quinta , en un año que ya sabe lo que es abrir la Puerta del Príncipe de Sevilla. Talavante, en la segunda comparecencia Isidril de las cuatro que tiene firmadas, y cierra el cartel el joven toledano Tomás Rufo, que ha irrumpido con fuerza en el escalafón, con apenas una decena de corridas de toros en su haber y con una Puerta del Príncipe ya en su currículum.