Muere a los 90 años el empresario y ganadero mexicano Alberto Baillères
El magnate, uno de los hombres más ricos de México, un apasionado de la Fiesta brava, desembarcó en el negocio taurino en España en 2015
A unas horas de lidiar en la Plaza México para celebrar su 76 aniversario, la muerte sorprendió a Alberto Baillères González a los 90 años. Emblemático por donde se le vea, el empresario nacido en la capital del país en agosto de 1931 era uno de los hombres más ricos de México, pero sobre todo un apasionado amante de la Fiesta brava. Fue ganadero, empresario, apoderado... Propietario de las principales plazas, como Guadalajara, Aguascalientes –la Monumental y la San Marcos– Monterrey; sin dejar de lado Acapulco, Irapuato, León. En la década de los setenta adquirió las ganaderías de Begoña (1970), San Miguel de Mimiahuápam (1972), Santa Teresa (1972) y San Martín, en la década pasada. En España es dueño de la famosa vacada de Zalduendo.
Don Alberto, como se le conocía, decidió dedicar gran parte de su vida, y su fortuna, a promover la Fiesta, su gran pasión. «La Fiesta brava es mi vida, tenemos la obligación de defenderla, de mostrarla tal como es, de cuidar el toro bravo que es la base fundamental para que los toreros triunfen y los aficionados se diviertan, para que el espectáculo taurino viva», dijo hace cuatro años en una entrevista realizada en el palco de ganaderos de la Monumental de Aguascalientes, una de sus plazas, y donde se celebra la de San Marcos, la feria más importante de América Latina.
Fue en 2016 cuando formó la empresa Tauroplaza México para administrar el escenario taurino más grande del mundo, junto al ganadero de Xajay, Javier Sordo. Aparte de su trascendencia en el ámbito económico, político y empresarial en México, era un hombre sencillo, afable, que disfrutaba de su familia, su mayor tesoro, por ello siempre iba acompañado de Teresa Gual, su esposa, y de sus hijos, que ahora se encargarán de sus negocios.
Alejandro Baillères, del Grupo Bal que reúne a todas sus empresas, desde la dirección del consejo de administración; mientras que en lo taurino su hijo Juan Pablo Baillères, es la cabeza del grupo, contando en España con la asesoría del matador de toros retirado Antonio Barrera, quien supo estrechar lazos con Baillères.
La noticia ha causado pesar en el mundo taurino, pues todos los protagonistas se habían cruzado personalmente o profesionalmente con el taurino más importante de México, pero también en el empresarial, donde se le quería por su trato siempre afable, en el que no hacía distingo. En México fue reconocido con la Medalla Belisario Domínguez que entrega el Senado de la República a los mexicanos más destacados.
Se espera que hoy se le rinda un homenaje en la Plaza México, donde lo veríamos llegar poco antes de las 18 horas para ocupar su sitio en el palco de ganaderos y , desde ahí, disfrutar de la actuación de Julián López ‘El Juli’, Octavio García ‘El Payo’ y Miguel Aguilar, quien tomará la alternativa.
La exitosa corrida de la semana pasada en León, Guanajuato, donde se lidiaron toros de San Miguel de Mimiahuápam, fue el último gran triunfo del mayor impulsor de la Fiesta en México.
Noticias relacionadas