Paco Ureña, herido y triunfador en Valencia
El palco le niega injustamente la puerta grande en una brava y noble corrida de Luis Algarra
Crónica
Se despide de Valencia Francisco Rivera Ordóñez . Vemos una extraordinaria corrida de Algarra: toros serios, bravos, repetidores, nobles y encastados: ¿qué más se puede pedir? Paco Ureña, herido, logra una gran faena: sorprendentemente, solo le dan una oreja y no puede salir a hombros, por una decisión presidencial absolutamente incomprensible.
Banderillea Paquirri con oficio al primero, bravo y repetidor; se muestra tranquilo en derechazos templados y hasta algún molinete de rodillas. El cuarto se pega un trompazo contra el burladero pero se recupera, con bravura. El trasteo tiene más profesionalidad que brillo y mata a la segunda.
El segundo embiste con nervio, puntea. Ureña logra naturales valientes, con mérito y emoción, tragando y sometiéndolo. Al entrar a matar, sufre un impresionante volteretón , se desvanece, lo llevan corriendo a la enfermería: sufre traumatismo cráneo-encefálico y contusiones. Sale con un apósito en la frente para matar al último: aunque está muy mermado, aprovecha la bondad de la res para trazar muletazos lentos y templados, con clasicismo y estética. Y se vuelca en la estocada: no puedo entender por qué no le dan la segunda oreja. (La bronca es épica y justa).
El tercero, «Peruano», causó sensación, en la desencajonada, por su agresividad. Es muy vivo, repite, encastado. López Simón se queda quieto y aguanta, con toques bruscos; acaba con el arrimón y los inevitables circulares invertidos. La emoción la ha puesto el gran toro. Mata caído: oreja. (Comenta un vecino: ¡qué bonito hubiera sido ver al bravo peruano Roca Rey con este bravísimo «Peruano»). Lidia en quinto lugar otro toro noble; saludan Siro y Arruga. López Simón da muchos muletazos pero sin relieve y falla con los aceros.
Sin ningún sentimentalismo, Ureña tenía que haber salido a hombros . ¡Qué falta de criterio! Igualar hoy con una oreja a dos faenas de mérito tan distinto no tiene sentido. En todo caso, puede estar orgulloso, merece los gritos de «torero» con que le despiden. Y la ganadería de Algarra, una gran ovación.
Posdata. La estocada ha sido siempre «la hora de la verdad» (el título de la película de Francesco Rossi sobre Miguelín). A los toreros se les llama, por antonomasia, «espadas». Antes, una buena estocada ya valía una oreja; un pinchazo en todo lo alto, aunque no fuese efectivo, una ovación. Se valoraba la ejecución de la suerte y la colocación de la espada, no sólo la rapidez de sus efectos. Eso sucedía en la Tauromaquia clásica… En la posmoderna, todos esos valores ya no existen.
Directo
Sexto toro
Ya está el último en la arena. Es el anunciado en quinto lugar. Paco Ureña, con un apósito en la frente por el traumatismo, recibe una ovación por su esfuerzo. Gran faena del torero de Lorca, rematada de una gran estocada. Incomprensiblemente, el palco le niega la segunda oreja. La bronca es monumental. Ureña mereció las dos orejas y la puerta grande.
Quinto toro
Se corre turno, pues Paco Ureña está siendo atendido en la enfermería de un traumatismo y varias contusiones por el volteretón. Sale el anunciado en sexto lugar, Lagartero, castaño, de 555 kilos. Otro buen toro. Saludan Siro y Arruga. López Simón da muchos muletazos sin apenas relieve. Dos pinchazos y cinco descabellos. Aviso. Silencio. Gran ovación al toro.
Cuarto toro
Tras la merienda, sale el cuarto, Garabito, negro, de 537 kilos. Se estrella contrra el burladero, pero se recupera. Trasteo profesional de Paquirri. Pinchazo y media. Silencio.
Tercer toro
Ya está en el ruedo el tercero, Peruano, negro mulato, de 495 kilos, un toro de bandera. López Simón hace una faena de aguante y quietud en medio de las emocionantes embestidas. Estocada caída. Oreja.
Segundo toro
Sale el segundo, Habanero, número 59, de 540 kilos. Paco Ureña torea francamente bien, con estupendos naturales con un toro con nervio. Al entrar a matar, en el segundo pinchazo, sufre un volteretón, se lo llevan grogui, pero vuelve con una tremenda paliza. Dos pinchazos. Aviso. Ovación.
Primer toro
Sale el primero, Gustoso, número 18, castaño, de 575 kilos. Toro bravo y repetidor, con el que Paquirri se muestra tranquilo, con ganas y con oficio. Empieza sentado en el estribo y logra derechazos estimables, con algún molinete de rodillas. Pinchazo y estocada desprendida. Palmas. Gustoso es ovacionado en el arrastre.
Paseíllo
Con dos tercios de entrada, hacen el paseíllo Rivera Ordóñez, de azul y oro; Ureña, de blanco y oro, y López Simón, de naranja y oro.
Sorteo
Esta mañana fueron sorteados los toros de Algarra que saltarán el ruedo a partir de las siete de la tarde. Garabito es el nombre del ejemplar con el que Francisco Rivera Ordóñez dirá adiós a la afición valenciana.
Cartel
¡Buenas tardes! Bienvenidos a la tercera corrida de la Feria de Julio de Valencia. Se anuncian toros de Luis Algarra para Paquirri, que se despide de esta plaza, Paco Ureña y Alberto López Simón.