Un cartel de rejones muy discutible en San Isidro
Martín Burgos y Andrés Romero cortan sendas orejas; Leonardo pierde el triunfo con el rejón de muerte en una buena corrida de Bohórquez
![Leonardo Hernández, en banderillas](https://s2.abcstatics.com/media/cultura/2018/05/12/1406786603-kNDB--1240x698@abc.jpg)
El cartel de seis rejoneadores nos devuelve a épocas pasadas: en San Isidro, parece, más bien, una fórmula cómoda para resolver compromisos. Seis caballeros, tres portugueses y tres españoles, con una sola primera figura, Leonardo Hernández. Que, en la primera Feria del mundo, veamos este cartel y no el duelo de Hermoso de Mendoza y Ventura tiene tela… Con reses de Fermín Bohórquez de buen juego, cortan trofeo Martín Burgos y Andrés Romero; el mejor toreo a caballo lo hacen Joao Moura y Leonardo Hernández pero pinchan.
Confirma alternativa el portugués Joao Telles , de ilustre dinastía, los Ribeiro Telles: es nieto, hijo, sobrino y primo de rejoneadores. Aguanta arreones de un toro muy rajado, que hiere a un caballo; se alarga y mata mal.
El veterano Martín Burgos , de Leganés, logra el par al violín y a dos manos. Mata caído pero corta oreja. (Hay que matar bien, no sólo rápido).
Rui Fernandes hace bailar al caballo y acierta en los quiebros pero mata atravesado.
Joao Moura , hijo del inolvidable «niño Moura», lidia bien, con «muletazos» por dentro, pero falla con el descabello.
Leonardo Hernández demuestra su categoría al llevar prendido al toro; entusiasma con las levadas pero pierde las orejas, al pinchar.
Andrés Romero , discípulo de Ventura, apuesta por la espectacularidad. Sus alardes ecuestres llegan al público. Mata rápido: oreja.
La repetición de suertes similares provoca monotonía. Prefiero un rejoneador, que actúe delante de los diestros de a pie, como antes se hacía; o dos, si existe real competencia, en vez de este carrusel de galopadas y rejones. Pero este público, distinto del de las otras tardes, aplaude casi todo.