Alejandra e Isabel arroparon a su padre en la entrega del VIII Premio Taurino ABC

Orgulloso y emocionado. Así se sentía Juan Antonio Ruiz «Espartaco» al posar junto a sus dos hijas, Alejandra e Isabel, en el homenaje que recibió en la Casa de ABC. Universitarias, afincadas en Madrid y con una belleza que es digna herencia de sus padres, las hijas del diestro cautivaron a todos los invitados, ya que además de sus encantos físicos son dos jóvenes educadas, discretas y muy sonrientes que ni buscan protagonismo ni quieren ser las clásicas hijas de papá. Más bien todo lo contrario. Tras el cóctel de bienvenida compartieron mesa con toreros como Eduardo Gallo y Ginés Marín. Se emocionaron cuando su padre les dedicó su trofeo taurino y declaró delante de todo el mundo que sus hijos son «lo más importante de mi vida».

Pero si las hijas de Espartaco fueron la sensación por lo adorables que resultan, quien llegó también muy feliz fue el torero José Ortega Cano, junto al diestro Uceda Leal. A Ortega se le ve encantado cuando se junta con los de su profesión y de ahí su gesto de alegría al conversar con el citado Espartaco o sus amigos Pepín Liria, El Fundi o Victoriano Valencia. Muy coqueto con chaqueta y chaleco de terciopelo, Ortega es un hombre nuevo y todo apunta a que este año por fin celebrará su boda con Ana María Aldón, la madre de su hijo pequeño y la mujer que le trajo la paz.

También radiante con su novia, Concha Azuara , llegó el diestro Sebastián Palomo Linares. La jueza de Valdemoro hizo un hueco en su complicada agenda para acudir a esta cena y poder escuchar en vivo los piropos que todos dedican a Sebastián Palomo «por quien no pasan los años», como le repetían sus colegas. Lo cierto es que para el pasado quedan las anginas de pecho y los infartos que sufrió tiempo atrás.

Impactaron la pareja de guapos formada por el torero albaceteño Manuel Caballero y su espectacular mujer, Carloti. No faltaron las mujeres toreras, como Cristina Sánchez y Conchi Ríos.

Con la lógica preocupación por los ataques que sufre la Fiesta, toreros, ganaderos y empresarios escucharon con atención el interesante discurso del otro premiado, Alberto López Simón , con quien muchos quisieron hacerse una foto. Tras su emotiva y apasionada defensa de la Tauromaquia, su hermano Gonzalo aplaudió feliz en compañía del resto de familiares.Tampoco perdió detalle un buen amigo del diestro de Barajas, el doctor Ángel Martín, a quien no se le pasó por alto el original corte de pelo de la pareja de Pepín Liria, una de las señoras más llamativas de la velada. Sin olvidarme tampoco del generoso escote, apenas camuflado por encajes, de Esperanza Aguirre o el moreno fondo de mar de la marquesa de la Vega de Anzo, una gran aficionada a los toros y de ahí que hasta tenga la asociación Majas de Goya de amigas de la Fiesta. No faltó la presidenta de esta peña de mujeres, María Ángeles Sanz.

En una velada tan taurina, que contó con el respaldo y apoyo del ministro de Cultura, no podía faltar el empresario de la primera plaza del mundo, Manuel Martínez Erice , a quien muchos profesionales felicitaban por los carteles que se barajan para la Feria de San Isidro.