Crónica pormenorizada de la ausencia de las figuras en Sevilla, según la empresa
Pagés ha intentado contratar a Morante con otro interlocutor, «pero no ha contestado»
Ya han visto la luz los carteles de la Feria de Abril de Sevilla , una feria envuelta en la polémica y marcada por la ausencia de cuatro figuras del llamado «G5»: Morante de la Puebla, El Juli, Miguel Ángel Perera y Alejandro Talavante. Ni el perdón público de la empresa Pagés, requisito que pedían los toreros, bastó... Al final, el único que hace el paseíllo es José María Manzanares, contratado el 24 de diciembre, tal y como pareció agradar a los demás «G5».
«Entendemos que uno se niegue desde el principio, pero no que se den vueltas para finalmente no venir»
La rueda de prensa de ayer versó sobre las ausencias. Los empresarios, Eduardo Canorea y Ramón Valencia, detallaron el proceso de «no» contratación, informa aplausos. En principio, a Morante «se le ofrecieron tres corridas, y aceptó una en San Miguel. Pidió las ganaderías de Victoriano y Garcigrande, las mismas que Manzanares. Juan Pedro Domecq la compartían, pero debían abrirse. Se llamó a Manzanares, que dejó Garcigrande. Morante pidió una quinta corrida, en la que se dudaba entre Cuvillo o Jandilla. Era el 19 de enero. El 20 llamamos a Luis Manuel Lozano (apoderado de El Juli) para concretar la contratación de su torero. Se le ofrece el Domingo de Resurrección y dos más. Pidió Victoriano y Garcigrande. Luego nos dijo que hablásemos con Perera, para finalmente decirnos que no toreaba...»
Negociaciones con Morante
Prosiguieron las negociaciones con Morante: «Cerramos Juan Pedro, Cuvillo, Jandilla, Garcigrande y Alcurrucén. Se habló de carteles, pero apenas se llega a hablar de dinero –relató Valencia–. Barrera (apoderado de Morante y representante de la FIT en España) preguntó por Talavante (apoderado por la FIT) y Perera. Pidió Resurrección para Talavante, y se aceptó». Luego se enterarían «por la prensa» de que no toreaba. «Se llamó a Perera y por teléfono nos dijo que no. Vino Cepeda (su apoderado) y nos manifiestó que no tenía intención de venir a Sevilla por la gran temporada que había hecho en 2014».
«Esta empresa ha dado su brazo a torcer, hemos pedido disculpas...»
Tras lo ocurrido, «Morante nos manda un mensaje con algunas quejas sobre los carteles. Se le ofrecen las cinco corridas. Pasados tres días, el torero anuncia su no comparecencia en Sevilla. El 21, la FIT (Fusión Internacional por la Tauromaquia, capitaneada por el mexicano Baillères) deja la puerta abierta para hablar con otros interlocutores en un comunicado. Lo buscamos, es un empresario al que le llamamos. Hablamos con él y Morante queda en contestar, y no ha contestado a fecha de 3 de marzo». Valencia concluyó: «Esta empresa ha dado su brazo a torcer, hemos pedido disculpas, hecho todo lo posible, estábamos seguros que todo se arreglaba... Entendemos que uno se niegue desde el principio, pero no que se den vueltas para finalmente no venir...»
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