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El Teatro de la Maestranza de Sevilla abre temporada con ‘Madame Butterfly’ y sin restricciones de aforo
La ópera cuenta con dos elencos para el rol principal, la soprano albanesa, Ermonela Jaho y la española Carmen Solís
El teatro de la Maestranza inaugura temporada con uno de los títulos de ópera más representados del mundo, ‘Madame Butterfly’ de Puccini. Pero no es una reapertura más, sino que esta vez, y tras año y medio, lo hará a teatro lleno, es decir, con sus 1.800 localidades puestas a la venta. El coliseo sevillano será el primero de España de ese aforo en abrir sus puertas con todo el público en sus butacas.
«Contemplar desde aquí el patio de butacas sin los letreros que bloqueaban las localidades hace mucha ilusión», ha dicho Javier Menéndez , director del Maestranza desde el escenario del teatro, donde se ha presentado la representación.
Detrás de todo el elenco de la ópera destaca una gran escenografía con enormes columnas y una bandera norteamericana que lucirá en el primer acto de la ópera de Puccini el próximo día 3, a la que seguirán funciones los días 6, 7 y 9 de octubre. Además, se recuperan los ensayos generales que serán el día 30, para personas de la tercera edad, y el día 5 con el segundo elenco, para jóvenes y personal del teatro. El teatro junto a la Asociación Sevillana de Amigos de la Ópera ha organizado también dos mesas redondas.
«Puccini es uno de esos compositores en crear ambientes. Si asistes a 'Turandot', ves China, en 'La Bohéme' nos transporta a París. 'La fanciulla del West' es el primer western y en 'Madama Butterfly' estamos en Japón», dijo el director del Maestranza.
En los papeles principales sobresalen las sopranos Ermonela Jaho y Carmen Solís, como Buttefly; Amadi Lagha y Enrique Ferrer como Pinkerton; Gema Coma-Alabert y Cristina Fau en el rol de Suzuki y Damian Castillo y Gerardo Bullón en el de Sharpless.
La ópera está dirigida por el maestro francés Alain Guingal , que debuta en Sevilla y quien ha destacado «el color de la música de Puccini. Yo no creo que sea una ópera verista, sino que es colorista, se asemeja más a Debussy o Massenet. Además, Puccini puso en valor los roles de mujer, sobre todo en Mimi y en Butterfly. Era un compositor que primero encontraba una idea y luego todo fluía orgánicamentel. Puccini entra en el drama ráidamente».
El maestro Guingal era el director de cabecera del tenor español Alfredo Kraus , con quien realizó más de 140 representaciones por todo el mundo, y sobre la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla opina que, «es una buena orquesta, aunque por motivos de seguridad con esto del Covid tengo reducido el número de músicos, ya que deben mantener la distancia y esto en la cuerda, sobre todo en Puccini, es importante, pero la orquesta está muy acostumbrada a interpretar ópera».
La dirección de escena es de Joan Antón Rechi , quien hace unos meses estuvo en Sevilla para remontar el montaje de la ópera ‘Carmen’ . Dice haber huido del típico escenario de la casita de la geisha para transportarnos a la época de la Segunda Guerra Mundial y la explosión de la segunda bomba atómica en Nagasaki. «Yo he querido ser fiel a Puccini, que subtituló esta ópera como ‘una tragedia japonesa’. El primer acto transcurre en el consulado norteamericano y el segundo, en el mismo consulado pero una vez que ha caído la bomba, y donde Butterfly acude una y otra vez a buscar a Pinkerton».
Rechi ha querido crear una 'Butterfly' vulnerable huyendo del concepto romántico. «Hay dos protagonistas muy diferentes. Ermonela Jaho produce una emoción incontrolable, hasta a mí me ocurrió en el antepiano cuando la escuché ensayar. Y Carmen Solís es una gran actriz, gran cantante y muy comunicativa y disfruta mucho con su papel».
Según el director de escena, ambas cantante abordan su papel desde posiciones muy distintas. «Ermonela tiene ese punto de la tragedia como si fuera una heroína de Tennessee Williams y Carmen es Ana Magnani. Ambas, haciendo el mismo rol, resultan muy distintas, pero también son grandes actrices. Yo le he dicho a Ermonela que el día que deje de cantar se dedique a la actuación».
Las emociones, a flor de piel
La soprano albanesa Ermonela Jaho está considerada como una de las grandes 'Buttefly' actuales y ha representado este rol en escenarios como el Metropolitan de Nueva York, Munich o Champs Elysées de París.
«Madama Butterfly es una ópera en la que están todos los sentimientos del ser humano: el amor, el sacrificio, la pena, la passión, la esperanza. .., y todos enfatizados. Por eso se produce una gran conexión con el público, sobre todo en este período difícil en el que hemos vivido y vivimos aún, en el que tenemos la necesidad de transmitir nuestros sentimientos. Ha habido tanta soledad que sentimos esa necesidad de comunicación», ha dicho la soprano.
Alabó igualmente que en España, durante la pandemia, los teatros hubieran permanecido abiertos : «Ver ahora un teatro lleno produce una emoción enorme». Igualmente ha resaltado al resto del elenco, «porque trabajamos como en una gran familia».
En cuanto a la construcción de su personaje, Ermonela Jaho dijo que «cada una lo hace desde su propia experiencia de vida, que es diversa». Preguntada sobre si había tenido miedo durante la pandemia, dijo que no: « E ste periodo que hemos vivido a mí me ha hecho más vulnerable y de alguna manera, en el mundo ha cambiado todo. No somos eternos, claro, pero si hemos tenido mucho cuidado contigo y con los demás».
Enrique Ferrer, el tenor que interpreta Pinkerton en el segundo reparto, ha apuntado que «en España acuñamos el eslogan de que la Cultura es segura, y así ha sido. Claro que nos hemos cuidado, nos hemos hecho pruebas y más y más PCR..., pero además de preocupados por coger el Covid, también lo estamos por contagiar a un compañero». Los cantantes, ha señalado Javier Menéndez, hacen vida monacal, «y eso en Sevilla está siendo muy difícil», bromea Enrique Ferrer.
La segunda Butterfly de este montaje es la cantante pacense Carmen Solís, quien debuta en una ópera en el Maestranza , si bien ha cantado en este teatro la zarzuela 'Entre Sevilla y Triana' de Sorozábal. «Butterfly es un papel complicado a nivel de emociones y muy exigente vocalmente. He cantado con Enrique Ferrer en otras óperas y nos compenetramos muy bien, además con los comprimarios», señala la soprano, quien será Butterfly el día 7 de octubre.
La producción que estrena el teatro de la Maestranza es una coproducción del Festival Castell de Peralada y de la Ópera de Rhin , y cuenta con el diseño escenográfico de Alfons Flores , el diseño de vestuario de Mercé Paloma y la iluminación de Alberto Rodríguez .