Festival de Danza de Itálica: ... y la naturaleza inundó el claustro de los muertos
Estreno de «Atma», de la Compañía griega Danae&Dionysios
![Un momento de «Atma»](https://s2.abcstatics.com/media/cultura/2019/07/19/s/danae-dionysios-critica-kYqB--1248x698@abc.jpg)
Estos dos jóvenes bailarines griegos viven preocupados por lo que medio mundo está en vilo: el medio ambiente, la conciliación de la vida rodeados de tecnología y de Naturaleza; su fuente de inspiración son las leyendas de Asia, el relato del leopardo de las nieves o del Hymalaya, y todo aquello con lo que el hombre está arrasando este siglo, sea animal o planta.
Danae Dimitriadi y Dionysios Alamanos son los coreógrafos e intérpretes de «Atma», una obra que cuenta con la composición musical de Constantine Skourlis , en la que además de compases contemporáneos se pueden escuchar sonidos del agua, el rumor de las plantas...
Y de repente el claustro de los muertos de San Isidoro del Campo se llena de naturaleza. Los dos intérpretes, muy pegados, uno delante del otro, mueven sus brazos como si fueran las ramas aladas de un árbol arrasado por el viento; sus manos se convierten en pequeños insectos que recorren la escena; a veces parecen que van a levantar el vuelo, pero en estos dos primeros movimientos no se separan el uno del otro, y de este tronco imaginario sólo vamos a ver sus ramas. Aparecen las garras y las mandíbulas del leopardo de las nieves en las manos de ella, y en la pared del fondo se van reflejando sus sombras como si fuera el teatro negro.
En el tercer movimiento ya los cuerpos se separan y comienza una ceremonia de coordinación en la velocidad de estos encuentros entre ambos, y sus brazos y manos siguen entrelazándose con una precisión matemática. Las manos de Dionysios se convierten en cientos de insectos que se mueven en la oscuridad ; Danae se sienta a la manera de Buda y él la iza como si creciera una planta.
«Atma» es una interesantísima «ópera prima» de unos jóvencísimos intérpretes de cuyo país sólo conocemos a ya consagrados coreógrafos como Dimitris Papaioannou, del que vimos en el teatro Central en 2017, «Still life», o Andonis Foniadakis cuya obra «Les Noces» está en el repertorio de la Compañía Nacional de Danza. Por eso está muy bien saber qué es lo que hacen los jóvenes creadores del país mediterráneo cuna de la filosofía, en la que la Danza, como ellos mismos dijeron, «lucha y sobrevive». Pero eso sí, sobrevive con obras de calidad como ésta, lo que no es poco.