Lope de Vega a la inglesa

Dominic Dromgoole José Ramón Ladra
Julio Bravo

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Esta producción de 'El perro del hortelano' que se presenta en los Teatros del Canal merece un aplauso antes de levantar el telón; montar hoy en dia una función con diez actores es una proeza para una compañía privada, más aun en el contexto de la pandemia, y traerse para ello a un director de prestigio internacional -y conocimiento probado del teatro de la época- como es Dominic Dromgoole, exdirector del Globe Theatre de Londres demuestra la altura de miras de la propuesta. Por eso ese aplauso inicial.

'El perro del hortelano' es una de las obras capitales del teatro español del Siglo de Oro, y por tanto de la historia de nuestro teatro. Lope de Vega tejió una comedia de un fino humor y unos personajes teñidos de encanto y de contradicciones. La trufó además con algunos de sus más hermosos versos: Diana y Teodoro, sus protagonistas, dicen en sus parlamentos sonetos tan bellos como '¿Qué me quieres, amor?' o 'Querer por ver querer envidia fuera', a los que es imposible resistirse.

Dominic Dromgoole, shakespeariano de pro, se ha acercado a Lope desde una perspectiva 'historicista' en su puesta en escena. Maniene encendido el patio de butacas durante la representación para recordar que en aquella época el teatro se representaba a la luz del día, ha llenado la función con músicas que recuerdan los ritmos de la ópera, ha simplificado la escenografía a cuatro elementos y le ha dado un ánimo popular (los actores entran en escena y saludan a los espectadores, e incluso nombran a sus conocidos).

El director británico ha optado por una puesta en escena muy gestual tanto por la coreografía como por el humor -en la representación que comento estuvo riendo a carcajadas desde el primer minuto-, con acentos caricaturescos casi hasta el ridículo en personajes como los dos pretendientes de Diana. Por contra, a ésta le confiere, incluso en los momentos en que el amor derrite su altivez, una frialdad que dificulta la visión de las varias caras del prisma que es este maravilloso personaje,.

La Fundación Siglo de Oro presenta una compañía con actores muy jóvenes que llenan la función de entusiasmo. De ellos destaca la expresividad de Raquel Nogueira, la veteranía (entendida como un grado, especialmente en la manera de decir) de Mario Vedoya y la jerarquía de Maria Pastor, una magnífica actriz de estirpe teatral.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación