José Sacristán vuelve a Miguel Delibes
El actor estrena «Señora de rojo sobre fondo gris», adaptación de la novela del escritor vallisoletano
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«No ignoro que el recurso de beber es un viejo truco para escapar de ti mismo». Son las primeras palabras de Nicolás, el protagonista de « Señora de rojo sobre fondo gris », adaptación teatral de la novela homónima de Miguel Delibes , que hoy viernes 16 se estrena en la localidad madrileña de San Sebastián de los Reyes, interpretada por José Sacristán -en el primer monólogo de su carrera-, bajo la dirección de José Sámano . Ellos mismos firman, junto a Inés Camiña , la adaptación. Sacristán y Sámano ya transitaron a Delibes hace casi treinta años en su montaje «Las guerras de nuestros antepasados». «Volver a Delibes -cuenta José Sacristán- es seguir aprendiendo a mirar; mirar en derredor, el entorno, a la gente... Con una mirada como la de Miguel, despojada de todo prejuicio, inteligente... Volver a Miguel Delibes es un lujo,el lujo de volver a su verbo».
En «Señora de rojo sobre fondo gris» (1991), Delibes evoca a su esposa, prematuramente fallecida en 1974 de un tumor cerebral cuando tenía solo 48 años. «Él crea en la novela un personaje, un pintor -sigue el actor-, pero todo el mundo sabe que la obra trata sobre el dolor inmenso que le produjo la muerte de su mujer, y es la reflexión a la que Miguel llega a propósito de lo que esta mujer significó en su vida». Es una pieza emocionante. «Sería estúpido por mi parte pretender descubrir a Delibes, pero su universo, entre otras cosas, apela siempre a los sentimientos . Y en este caso es además un sentimiento muy particular».
Dice Sacristán que cuando lee o interpreta un texto de Miguel Delibes aprende a mirar como él lo hacía . «Igual a él no le gustaría lo de la pedagogía -matiza-, porque él era un maestro pero que no iba de “enseñador”. Lo prodigioso de Miguel es crear una peripecia dramática tan estremecida como es la de este personaje, y la reflexión sobre los sentimientos y sobre la condición humana: la vida, la muerte, el amor...».
Reconoce José Sacristán que a estas alturas de su vida y de su carrera tiene el privilegio de que « la naturaleza se siga portando generosamente conmigo y me va dando margen de movimiento y de lucidez». Y, como profesional, añade, «poder elegir; y poder elegir un trabajo como éste, y ocuparme de este menester me hace mejor, o al menos eso creo». Ser mejores lo buscamos todos . «No sé si todos; no sé si Trump lo busca, ni tampoco algunos desaprensivos. Pero yo sí aspiro a que mi relación con los demás tenga el mayor nivel de calidad posible; al menos con aquellos que a mí me merecen la pena. En definitiva, creo que hay algo importante todavía en la condición humana, que es una forma de inteligencia que apunta siempre a la bondad , y ese es el caso de Miguel».
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