Revive los comienzos del clásico infantil en «Campanilla, el musical. El origen»
Pequeños y mayores podrán disfrutar de Peter Pan y Campanilla en el Teatro Rialto del 6 de diciembre al 5 de enero
Llega a la Gran Vía madrileña uno de los personajes más queridosde la literatura clásica infantil, Campanilla. Un hada que se ha convertido en un personaje imprescindible para seguir nutriendo nuestro inmenso campo de sueños y creatividad porque, a estas alturas, tengas la edad que tengas ¿quién no es capaz de seguir creyendo en las hadas?.
«Campanilla, el musical. El origen» recuerda a todos aquellos personajes que creó James Matthew Barrie, el novelista y dramaturgo escocés que, a pesar de su dilatada carrera literaria, fue conocido como el autor de Peter Pan. Los espectadores que acudan a ver «Campanilla, el musical. El origen» podrán revivir el primer encuentro entre Campanilla y Peter.
De la mano de Fran Barranco, Manuel Bartoll, Ana Conca, Eva Trías y Raquel Aegashie llega a Madrid una historia que comienza cuando se descubre que las hadas necesitan, también, ir a una escuela donde se les enseña la mejor forma de realizar su misión, que no es otra que cuidar de los humanos para que sean buenas personas, generosos y capaz de ayudar a sus semejantes. Pero las hadas nunca pueden ser vistas por los humanos, hasta que Campanilla y sus amigas, se quedan prendadas, y enamoradas, de un humano: Peter. Gracias a la benevolencia de la gran reina de las Hadas, consiguen ser humanas durante un día, y ahí es donde comenzará la verdadera relación entre Campanilla y Peter Pan.
Un espectáculo lleno de canciones y de bailes, en el que, además, también se emplean escenografías digitales a través de proyecciones que conseguirán envolver al espectador, creando atmósferas y ambientes con los que disfrutar de ese paisaje mágico que se desprende desde Nunca Jamás. En definitiva un cuento contado de otra manera, pensado para disfrutar en familia con constantes guiños hacia los adultos que durante 90 minutos volverán a ser niños, y que junto con sus hijos, volverán a ponerse el parche en el ojo y volver a creer en un mundo mágico.